Altxor, que en castellano significa tesoro, reúne todas las condiciones para que sus potenciales usuarios lo vayan a acoger como tal. Se trata de un nuevo servicio que presentó el Gobierno vasco el pasado mes de octubre y que abre sus puertas en Bilbao, Donostia y Vitoria-Gasteiz para orientar a las personas mayores de 60 años. 
Impulsado por el Departamento de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico, este proyecto se dirige al segmento de la sociedad vasca que se encuentra en la etapa inmediatamente posterior a jubilarse y cuyo propósito es vivir con autonomía, conexión y acompañamiento.
El servicio es pionero y además cuenta con un ecosistema digital de atención remota, accesible desde todo el territorio. Sus tres primeras oficinas, ubicadas en las tres capitales vascas, abrieron de manera simultánea, con una visión de la iniciativa innovadora: ofrecer un espacio de escucha, orientación y conexión para las personas mayores, que hoy en día tienden a ser diversas, activas y con ganas de seguir participando en la vida social y comunitaria.
A través de una atención personalizada, tanto presencial como online, el servicio les ayuda a identificar sus necesidades, acceder a recursos disponibles en su entorno y construir nuevos proyectos vitales desde el empoderamiento. La consejera de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico, Nerea Melgosa, explica que ‘‘tener una vida plena cuando nos hacemos mayores es un derecho y si esa vida se hace participando en la comunidad, es un verdadero tesoro’’. Partiendo de esta base, subraya que Altxor ‘‘refleja’’ tal perspectiva y que, por lo tanto, nace como ‘‘un servicio que apoya, acompaña y reconoce el valor de las trayectorias vitales de las personas mayores’’. 
Que sean ‘‘protagonistas’’
Según el Eustat, en Euskadi, hoy en día, hay 528.954 personas mayores de 65 años y representan el 24% de la población. Hace 15 años, en 2010, las personas mayores eran 415.232 y representaban un 19% de la población total. En este contexto, Altxor extiende su oferta a usuario que sobrepasen los 65 años. Una edad, entienden en el proyecto, en la que también empiezan a surgir dudas, inquietudes, ilusiones o ideas acerca de todo aquello que está por llegar. 
Melgosa apunta que ‘‘esta estrategia se basa en la necesidad de un nuevo modelo de abordaje del envejecimiento, que prioriza el protagonismo activo de las personas mayores y su bienestar’’. De ahí que Altxor aspire a convertirse en una ‘‘herramienta que va a dar respuesta a miles de personas que, tras finalizar su etapa laboral remunerada, quieren seguir aportando a la sociedad, pero no saben exactamente cómo’’. Por lo tanto, la consejera afirma que ‘‘el colectivo de las personas senior no es un tesoro que haya que guardar en un museo, es la savia activa que fluye por las raíces, el tronco y las ramas de nuestra sociedad. Una savia que sigue dando vida allá por donde va, en la familia, en la asociación de barrio, en la empresa o en la universidad’’. 

A través de una atención tanto presencial como online, el proyecto ayuda a los usuarios a identificar sus necesidades y a acceder a recursos disponibles en su entorno

Altxor se ha diseñado para llegar tanto a personas mayores que viven en entornos urbanos como rurales, adaptándose a distintas situaciones particulares. De esta manera, cada oficina ofrece atención directa, orienta, resuelve dudas, acompaña y ofrece acceso a recursos sociales, culturales y de salud.
Además, el servicio incorpora una plataforma virtual que permite realizar videollamadas, compartir contenidos de interés, participar en actividades y recibir apoyo desde casa, según informa el Gobierno vasco. Este modelo híbrido de atención facilita el poder acompañar a personas con diferentes niveles de autonomía, capacidades digitales y contexto social, garantizando siempre un trato cercano y respetuoso, añaden desde el Ejecutivo. 
Un lugar de encuentro
Las personas usuarias han valorado especialmente que Altxor no es únicamente un lugar de atención, sino también un punto de encuentro, un espacio donde sentirse acompañadas y donde poder iniciar nuevas etapas con confianza. Construido en colaboración con el entorno, este proyecto pionero es fruto de un proceso de diseño colaborativo, en el que han participado entidades sociales, profesionales del ámbito gerontológico y, especialmente, personas mayores, y que ha contado con la colaboración de los tres ayuntamientos. 
Las oficinas de Vitoria-Gasteiz se encuentran en el Centro Comercial Aretxabaleta, en el local número 4 de la calle Iruzaiz-Gauna. Por su parte, la sede de Bilbao se sitúa en el número 57 de la calle Islas Canarias, junto al barrio de San Ignazio, cerca de la ría y en un lugar próximo a Zorrotzaurre, punto de la ciudad que se encuentra en pleno proceso de crecimiento. 
En Donostia, por último, las oficinas de Altxor están en el número 31 del paseo Duque de Mandas, en el corazón del barrio de Egia, muy cercano al centro de la ciudad, por lo que resulta ciertamente accesible.