Bilbao tiene un reto: crear empleo en la ciudad. Para ello, es preciso promover actividad económica, favorecer y atraer empresas e inversiones, e impulsar el desarrollo de nuevos sectores estratégicos de valor. Sólo así podremos sentar unas bases sólidas para generar empleo estable, aumentar el poder adquisitivo de la población y recuperar la confianza. Son muchas las voces que apuntan a una superación definitiva de la crisis, amparándose en datos e indicadores que avalan esta tesis, aunque la realidad evidencia que las consecuencias de seis años de recesión continuarán estando presentes y condicionarán la vida de una parte importante de la