En un ejercicio marcado por la incertidumbre primero, y por el dinamismo después, el sector de la máquina-herramienta dio continuidad en 2023 al crecimiento que venía registrando en los dos años precedentes, y superó las cifras tanto de facturación (+17,1%, rebasando los 2.000 millones, un dato histórico) como de pedidos (+12%) y de exportaciones (+20%). Ante esta coyuntura, las empresas vascas mantuvieron sus inversiones, mientras que Euskadi se posicionó como referente en innovación a nivel internacional. P ese a venir de un año en el que se habían superado las expectativas de crecimiento en la facturación y en la captación de pedidos, el
La producción de vehículos se incrementó levemente a nivel estatal en un ejercicio que se caracterizó por la inestabilidad que viene arrastrando el sector desde 2019, agudizada después al estallar la pandemia. Los resultados económicos de la industria vasca, atendiendo a las previsiones realizadas tras la invasión de Rusia a Ucrania, “finalmente fueron positivos” dada su capacidad de resiliencia y adaptación al entorno en su búsqueda de la excelencia operacional. Mientras, el Gobierno español puso en marcha el Perte VEC para transformar el sector hacia la electrificación a través de una inversión total de más de 24.000 millones de euros hasta