La firma Credeblug, de Azpeitia, fabricante de pulpos, cucharas y pinzas para carga y descarga, empezó a exportar con cierta regularidad hace más de 20 años a mercados cercanos como Francia y Portugal, y no fue hasta 2007 cuando, viendo que tenían un producto competitivo en el exterior, decidieron dar un giro a su gestión comercial, crear una dirección ‘ad hoc’ e identificar, con el apoyo del Gobierno vasco, la estrategia de internacionalización más adecuada. “Si hace 10 años exportábamos un 25%-30%, ahora estamos cerca del 80%, lo que nos ha permitido bandear la crisis, compensando en el exterior la caída de ventas del mercado nacional”, e