Vicrila invertirá 17 millones de euros en los próximos cinco años para aumentar su gama de productos e introducir mejoras tecnológicas en materia de innovación en los tratamientos térmicos, automatización y la reorganización de la producción de su planta de Lamiako (Bizkaia). El objetivo de la firma de vidrio es duplicar las ventas en ese periodo y pasar de 25 millones en 2018 a 50 millones en 2022.
La empresa ha diseñado un plan de relanzamiento que abarca el periodo 2018-2022, y que supondrá importantes mejoras en competitividad y eficiencia. El director general de la compañía, Fernando Bermejillo, ha señalado que el Plan Estratégico está orientado a lograr “ser líderes de su segmento” al final del periodo y reforzar su presencia en los mercados exteriores.
Las inversiones previstas buscan la flexibilización de sus líneas de hornos, introduciendo una mayor automatización, para “generar más valor añadido en los procesos, diversificar la oferta de productos y aumentar producción disminuyendo los costes y el gasto energético”.
El fabricante de vidrio prevé que mediante los distintos ajustes previstos, los gastos totales anuales tengan una disminución anual del 1,5% sumados todos los capítulos.
Asimismo, el Plan tiene el objetivo de situar su porcentaje de exportación en el 60% de la producción en 2022. En la actualidad, Vicrila vende en el Estado el 60% de la producción y el 40% en el exterior. Para lograr ese incremento de las ventas internacionales, prevé entrar en Estados Unidos a través de sus alianzas comerciales con sendas firmas de Reino Unido (Neville) y México (Pavisa).
En cuanto a la automatización, se centrará en los procesos “que no aportan valor añadido”, incluidos los procesos de inspección de productos. Dicha automatización busca “eliminar las tareas repetitivas”.
Respecto a la plantilla actual, 237 personas, el Plan Estratégico contempla “un crecimiento razonable”, centrado en primer lugar en “mejorar su capacitación”, de cara a la progresiva mayor automatización del proceso de fabricación.