rganizada desde 2017 por el Gobierno vasco, la Bienal Internacional de Arquitectura de Euskadi Mugak que acoge el Palacio de Congresos Kursaal, celebra su cuarta edición como la principal cita arquitectónica del Arco Atlántico, un evento que aspira a seguir creciendo respecto a su edición anterior, que reunió a más de 70.000 asistentes a lo largo de un mes entero de arquitectura. Programada hasta el próximo 24 de noviembre, con un centenar de actividades gratuitas para toda la ciudadanía en las tres capitales vascas, durante su inauguración, el lehendakari Iñigo Urkullu puso en valor que “Euskadi debe adecuar las ciudades, pueblos, barrios y edificios a las necesidades del siglo XXI y debemos hacerlo de la mano de las personas; nuestro objetivo es extender el conocimiento y favorecer la participación en este proceso de reconstruir, rehabitar, repensar”, en referencia al lema de esta edición.

El programa de la Bienal profundiza en los retos de la sociedad actual y en cómo se quiere abordar el futuro de las ciudades

Ese es precisamente el lema ‘reconstruir, rehabitar, repensar’, en el que el programa de la Bienal profundiza en los retos de la sociedad actual y en cómo se quiere abordar el futuro de las ciudades en un contexto de incertidumbre y de cambios vinculados al cambio climático. Para ello, en las tres capitales vascas se han construido pabellones efímeros en espacios públicos donde desarrollar las diversas actividades.
Por su parte, la exposición central, ‘Habitar el cambio’, es una muestra coral en la que diez representantes del sector y del mundo de las artes dan la oportunidad a la ciudadanía de debatir sobre grandes retos de la sociedad y de la propia arquitectura.