Planta piloto para transformar residuo orgánico en fertilizante
Está ubicada en los terrenos agrícolas de Neiker en Arkaute (Álava)
- Estrategia Empresarial
- 17-Diciembre-2014
La instalación de Neiker-Tecnalia ha contado con un presupuesto de 1,8 millones de euros.
Neiker-Tecnalia ha puesto en marcha una planta piloto que transforma el material orgánico resultante de las plantas de biogás en fertilizantes de alto valor añadido. De esta forma se consigue cerrar el ciclo de ese material orgánico sin que se generen residuos, al mismo tiempo que se le da una salida comercial.
La instalación se ubica en los terrenos agrícolas de Neiker en Arkaute (Álava) y ha contado con un presupuesto de 1,8 millones de euros, financiados por la Unión Europea en el marco de un proyecto CIP-Ecoinnovation y por las cuatro entidades participantes en la iniciativa: Neiker, Ekonek Innovación en Valorización de Productos, Blue Agro y la empresa holandesa Colsen. La materia prima con la que trabaja esta innovadora planta de tratamiento es el digestato, resultante de las plantas de biogás tras el proceso de digestión anaeróbica (proceso de digestión de materia orgánica en condiciones de falta de oxígeno que tiene como finalidad la obtención de biogás).
La instalación se ubica en los terrenos agrícolas de Neiker en Arkaute (Álava) y ha contado con un presupuesto de 1,8 millones de euros, financiados por la Unión Europea en el marco de un proyecto CIP-Ecoinnovation y por las cuatro entidades participantes en la iniciativa: Neiker, Ekonek Innovación en Valorización de Productos, Blue Agro y la empresa holandesa Colsen. La materia prima con la que trabaja esta innovadora planta de tratamiento es el digestato, resultante de las plantas de biogás tras el proceso de digestión anaeróbica (proceso de digestión de materia orgánica en condiciones de falta de oxígeno que tiene como finalidad la obtención de biogás).
De alta calidad
El resultado es una amplia gama de fertilizantes de alta calidad en diferentes formatos, uno de ellos son los microgránulos de 0,5 a 1,5 milímetros de diámetro, que pueden conseguir una producción equivalente a la convencional pero con dosis casi diez veces menores.
Las ventajas del fertilizante obtenido por Neiker-Tecnalia se basan en que se trata de un producto que requiere dosis más bajas que los fertilizantes tradicionales y libera sus nutrientes de una manera lenta, lo que implica un menor impacto en el medio ambiente.
Resulta un producto muy apropiado para ser utilizado en cultivos de alto valor añadido, como césped deportivo, cultivos ornamentales y cultivos agrícolas especialmente delicados. Los técnicos han concluido que puede ser comercializado con un precio de entre 100 y 500 euros por tonelada, según el abono concreto.
El resultado es una amplia gama de fertilizantes de alta calidad en diferentes formatos, uno de ellos son los microgránulos de 0,5 a 1,5 milímetros de diámetro, que pueden conseguir una producción equivalente a la convencional pero con dosis casi diez veces menores.
Las ventajas del fertilizante obtenido por Neiker-Tecnalia se basan en que se trata de un producto que requiere dosis más bajas que los fertilizantes tradicionales y libera sus nutrientes de una manera lenta, lo que implica un menor impacto en el medio ambiente.
Resulta un producto muy apropiado para ser utilizado en cultivos de alto valor añadido, como césped deportivo, cultivos ornamentales y cultivos agrícolas especialmente delicados. Los técnicos han concluido que puede ser comercializado con un precio de entre 100 y 500 euros por tonelada, según el abono concreto.