La sociedad de préstamos participativos Luzaro, integrada por el Gobierno vasco, las entidades bancarias Kutxabank, Laboral Kutxa, Banco Sabadell, Bankoa, Abanca, y la sociedad pública Enisa, formalizó el año pasado 213 operaciones por un importe total de 57,8 millones de euros, lo que supone un incremento del 23% respecto al ejercicio 2023 y superando, de esta manera, los históricos resultados logrados en 2022. Una tendencia que se está manteniendo al alza en este 2025, ya que, según explican desde la sociedad, prevé un incremento del 24% en la concesión de estos créditos a pymes.
La mayor parte de la financiación aportada por Luzaro a las empresas se destina a la inversión en pabellones, compra de maquinaria e incremento de su capacidad productiva. Paralelamente, la sociedad está recibiendo solicitudes de startups para lanzarse al mercado con un producto homologado. “En este caso, necesitan la financiación para invertir en instalaciones adecuadas para crecer”, explica su directora general, Elena Urbizu.
El perfil de las empresas, que reciben los servicios financieros de Luzaro, en concreto el 70%, son pymes de tamaño pequeño y que facturan menos de cinco millones de euros, mientras que el 46% de estas compañías cuentan con menos de 20 empleados en sus plantillas. “Nuestro foco está principalmente puesto en microempresas y pymes”, subraya Urbizu.
La sociedad de préstamos participativos también colabora activamente con otras entidades internacionales para ofrecer un mayor respaldo financiero a las empresas vascas. En esta línea, ha suscrito con el Banco Europeo de Inversiones (BEI) un préstamo de 100 millones de euros con el aval del Gobierno vasco, que permitirá movilizar hasta 280 millones de euros en inversiones y facilitar el acceso al crédito en condiciones ventajosas a más de 1.000 pymes y empresas de mediana capitalización.