Desde el almacén hasta la carretera, el sector de la logística y el transporte –y, en general, la movilidad de personas y mercancías–  acelera su transformación de la mano de la digitalización. Las nuevas tecnologías, como la inteligencia artificial, la robótica, la cadena de bloques, los vehículos autónomos y los drones, se 
hacen cada vez más presentes en los procesos y las operaciones, con un avance que ya es imparable y que, 
sin duda, beneficiará a las cadenas de suministro y a las personas consumidoras.

Sostenibilidad, eficiencia, descarbonización, multimodalidad, conectividad, inteligencia, inclusión… Estos son los principales conceptos que perfilan la nueva movilidad, la que quiere convertir a las ciudades y al entorno rural en lugares mejor conectados y de forma más segura. Y, todo ello, de la mano de la tecnología y los datos, cuya combinación convierte al sector de la logística y el transporte en uno de los que presentan innovaciones más disruptivas.
Desde los sistemas de gestión de almacén (SGA), que permiten integrar las características de la propia infraestructura con la demanda de productos, para hacer más eficiente el proceso y la gestión de inventarios, hasta los sistemas de gestión de transporte (TMS), que posibilitan la gestión de las flotas y la conexión con los transportistas que realizan la distribución de los productos, de forma que puedan tener visibilidad sobre sus envíos y ofrecerla al cliente final. Todo ello forma parte de la gestión de la cadena de suministro, que abarca desde la adquisición de materias primas hasta la entrega del producto en su destino final. Una gestión en la que la nube, por ejemplo, es un aliado natural, en parte porque las aplicaciones basadas en ella son inherentemente más flexibles y adaptables al cambio.

Tendencias
Y, en un escenario en el que la creciente globalización y los flujos de mercancías mundiales derivados están provocando un aumento de la demanda de los servicios logísticos, los expertos analizan el presente y predicen el camino que tomará el sector en el corto, medio y largo plazo. Por ejemplo, la multinacional taiwanesa Getac y el portal alemán de estadística en línea Satista han identificado cinco tecnologías clave que, a juicio de los proveedores de servicios logísticos, desempeñarán un papel fundamental en el futuro del sector, contribuyendo a optimizar su eficiencia operativa, agilizar los procesos de almacenamiento y reducir los plazos de entrega. Se trata de la inteligencia artificial (IA), la robótica, los vehículos autónomos, el ‘blockchain’ y los drones. Son tecnologías con un gran potencial en la logística y el transporte –en la movilidad, en general–, que pueden aportar importantes ventajas competitivas y operativas, si bien para sacar el máximo provecho de ellas es preciso contar con la infraestructura digital necesaria. Y ello implica disponer de un entorno digital sólido y seguro, con dispositivos capaces de responder a las exigencias de la IA y el procesamiento de ‘big data’, así como de aplicaciones especializadas para funcionar de manera eficaz, y de una estrecha supervisión y gestión de activos para maximizar el rendimiento de la inversión. 

Tecnologías como la inteligencia artificial (IA), la robótica, los vehículos autónomos, el ‘blockchain’ y los drones tienen un gran potencia en la logística y el transporte –en la movilidad, en general–, y pueden aportar importantes ventajas competitivas y operativas

Según Jerry Huang, director senior de Desarrollo de Mercado Global de Getac, la inteligencia artificial ya está revolucionando muchos aspectos de las operaciones, desde la gestión de inventarios y la atención al cliente hasta la ciberseguridad y la prevención del fraude, y muy pronto la IA desempeñará un papel fundamental en la estrategia empresarial de casi todos los proveedores de servicios logísticos. También la robótica está creciendo rápidamente en el sector y, adecuadamente gestionada y mantenida, puede ayudar a racionalizar la producción, aumentar la seguridad y garantizar un nivel extremadamente alto de coherencia en toda la cadena de suministro. Lo mismo que los vehículos autónomos, que no solo tienen el potencial de reducir los costes logísticos del transporte por camión en casi un 50%, sino que también pueden reducir los plazos de entrega en un 40%. Pero no solo en las carreteras: se prevé que el mercado de los trenes autónomos crezca anualmente más del 6%, alcanzando casi 13.000 millones de euros en 2026. Asimismo, los drones, esos vehículos voladores pilotados remotamente, se están haciendo un importante hueco en el ámbito comercial y, en no mucho tiempo, podrán entregar paquetes a los clientes a la puerta de su casa.
Pero, al tiempo que la digitalización acelera la transformación de la actividad, también aumenta la ciberdelincuencia, por lo que la ciberseguridad es cada vez más una parte importante de toda estrategia empresarial. Y ya muchos proveedores de servicios logísticos considera la cadena de bloques (‘blockchain’) como una tecnología que puede ser aplicada y utilizada por todos los actores clave de la cadena de suministro, para crear ecosistemas digitales muy seguros y fiables.

Ejemplos en Euskadi
Mucho de todo esto no es solo cosa del futuro, sino una realidad que ya cuenta con importantes ejemplos, como los que se pudieron ver en el último Congreso ITS Euskadi de Tecnologías Inteligentes de Transporte, organizado por el Clúster vasco de Movilidad y Logística (MLC-ITS Euskadi). En esta cita anual de las empresas y agentes que están trabajando en el País Vasco en materia de movilidad y tecnologías de transporte, se presentaron los últimos avances sectoriales de la mano de los proyectos más innovadores en ámbitos como la electromovilidad y la movilidad autónoma, así como en las tecnologías, soluciones y servicios que las hacen posibles, tanto en materia de transporte de personas como de mercancías.

Desde la empresa Seat, se ofreció la visión de los fabricantes de automóviles y se destacó que la sostenibilidad medioambiental y, por tanto, la necesidad de reducir las emisiones de sus productos y, en general, su huella de carbono a lo largo del ciclo de vida del producto, son elementos clave de su estrategia a todos los niveles. En materia de movilidad autónoma, la empresa Umiles presentó sus avances en vehículos no tripulados, tanto aéreos –como su aerotaxi– como de reparto. En ambos casos, se incidió en las diferentes fases de automatización, hasta llegar al último grado de movilidad autónoma.

En materia de tecnologías y soluciones, se ofrecieron alternativas basadas en visión e inteligencia artificial. Dinycon presentó su aplicación para la gestión de flujos de personas y Asimob propuso su uso para inventariar elementos de las infraestructuras; como por ejemplo, las barreras de protección de la carretera y la detección de defectos en ellas. A ellas se sumó la intervención de las empresas Vicomtech y Gertek, que expusieron su trabajo en torno a una plataforma para la digitalización de infraestructuras basada en conectividad 5G.

En Euskadi, empresas y agentes del Clúster vasco de Movilidad y Logística (MLC-ITS Euskadi) avanzan en proyectos innovadores en ámbitos como la electromovilidad y la movilidad autónoma, así como en las tecnologías, soluciones y servicios que las hacen posibles

También se presentaron cuestiones tan novedosas como la aplicación de las tecnologías cuánticas. Tecnalia defendió que, de todas las tecnologías en las que se están trabajando actualmente, la cuántica es posiblemente la que tiene el potencial de impacto más radical en ámbitos relacionados con la salud, el medio ambiente, la energía, el transporte, la seguridad o la industria. Aunque son tecnologías noveles, ofrecen la promesa de sobrepasar muy significativamente en impacto a sus contrapartes clásicas. Sin embargo, aún constituyen una apuesta ante la que, como tal, sería deseable al menos prepararse, se sugería desde Tecnalia.
En materia tecnológica y digital se abordaron aplicaciones orientadas a la logística de mercancías. Como la automatización de vehículos pesados, expuesta por Zenialabs; las opciones para la transición energética de flotas, presentadas por Mobilsafe; las identidades digitales autogestionadas para mejorar la seguridad, aplicadas por Wimbitek, o la digitalización y la adaptación a cambios legislativos, a cargo de la empresa Igarle. Y, para acelerar la llegada al mercado de las innovaciones en forma de producto, el centro tecnológico Ceit y la Diputación de Gipuzkoa presentaron el Gipuzkoa Living Lab, un espacio de pruebas de tecnologías cooperativas, conectadas y autónomas orientadas hacia las infraestructuras inteligentes. 
En la decimotercera edición del Congreso ITS Euskadi de Tecnologías Inteligentes de Transporte también se reconoció que, dentro de su gravedad, el contexto energético actual está suponiendo la ventaja de acelerar la transición medioambiental y tecnológica de la movilidad.