Las 34 organizaciones asociadas en 2018 a la Asociación Clúster del Papel de Euskadi facturaron 1.182 millones de euros (+5,9% respecto a 2017), de los que 612 millones (+1,6%) fueron exportaciones. Estas invirtieron 41 millones y generaron un empleo directo de 2.338 personas (+8,4%). La producción de pasta y papel fue de 1.329.000 toneladas (-2,6%). Estos resultados se alcanzaron en un contexto de mercado que fue empeorando a lo largo del año. Además, la variación interanual de los resultados estuvo condicionada por la evolución del número de socios del clúster y de su perfil en 2018.
Estos datos y los retos a los que se enfrentan en 2019 las empresas asociadas fueron expuestos por el presidente y el gerente de la asociación, Senén Amunarriz e Iñaki Ugarte, respectivamente, en su 22ª Asamblea General, donde se hizo hincapié en las oportunidades por el desarrollo de la bioeconomía forestal.
Entre los retos para este año está revertir la demanda en retroceso. En los últimos años, los pedidos de los papeles relacionados con el ‘packaging’ han crecido de forma importante mientras caía el consumo, y la producción, de papeles gráficos. Las inversiones en 2018 y previstas para 2019 por el clúster tienen como objetivos los nuevos productos y mercados, la industria 4.0 y la productividad, así como continuar con la minimización del impacto medioambiental.