Desde el tercer trimestre de 2020, la economía vasca no ha parado de crecer. A diferente ritmo, pero en trayectoria ascendente, el PIB encadena siete trimestres de aumento consecutivo. En el primero de 2022 ha subido un punto con respecto al cuarto de 2020 y, en relación con el mismo período de 2021, el crecimiento es del 5,7%, según Eustat, confirmando los datos apuntados en el Avance de las Cuentas trimestrales, realizado el pasado 25 de abril.
El crecimiento en términos interanuales del PIB vasco se sitúa por encima del estimado para la Unión Europea (5,2%), la zona Euro (5,1%) y los Estados Unidos (3,5%), aunque por debajo del de la economía española (6,4%). Desde el punto de vista de la oferta, todos los sectores –excepto el primario– crecen en términos interanuales durante el primer trimestre de 2022. El empleo, por su parte, también aumenta: en comparación con el cuatro trimestre de 2021, la subida es de nueve décimas, mientras que, en relación con el primer trimestre de 2021, el incremento es del 5%.

Por otro lado, y según los datos recogidos en el ‘termómetro’ de mayo, que el Departamento de Economía y Hacienda elabora sobre la base de más de 100 indicadores, la economía vasca se mantuvo en mayo en la zona de ‘crecimiento sólido’, al continuar por encima de 100 puntos.
En concreto, el pasado mes alcanzó los 129 puntos, cuatro décimas menos que en abril (129,4). Con ello, se encadena ya tres meses de suave desaceleración, en parte debido a que el consumo privado muestra un comportamiento menos expansivo a consecuencia de la subida de los precios.
Por sectores, tanto la industria como, especialmente, los servicios ofrecen un perfil de ligera desaceleración, si bien se mantienen en tasas muy elevadas. También el empleo ha moderado un poco su fuerte ritmo de crecimiento.