La Bolsa española negoció en renta variable 20.402 millones de euros en septiembre, un 6,5% más que en agosto y un 15,3% menos que el volumen registrado el mismo mes del año anterior. En el acumulado del año, el volumen contratado descendió un 19%. El número de negociaciones en el mes fue de 2,06 millones, lo que supone una subida de un 6,4% respecto a agosto y una caída del 27,4% respecto a septiembre de 2022.
El mercado de renta fija alcanzó los 16.771 millones de euros, lo que supone un alza del 67,3% en relación al año anterior, así como un incremento del 60%, debido a la ralentización de la actividad del mercado durante el verano.

Se incrementa también el mercado de renta fija, con un 67,3% más que el año pasado, los derivados, así como la negociación de los futuros

El mercado de derivados financieros aumentó la negociación un 10% hasta este mismo mes, respecto al mismo periodo del ejercicio pasado, si bien ha experimentado un descenso interanual del 32,4%.
Por su parte, la negociación de contratos de futuros sobre Ibex cayó un 22% interanual, mientras que las operaciones sobre el Ibex 35 y acciones también tuvieron una evolución negativa con descensos del 64,5% y del 23,6%, respectivamente.
De cara al cierre de año, la renta variable logrará mantener sus revalorizaciones de doble dígito obtenidas durante 2023, destacando el Nasdq, en el Ibex35 y el Topix. Con respecto a la renta fija, no se estiman subidas adicionales por parte del FED y del BCE. “La dispersión sectorial en resultados en renta variable que hemos visto este año disminuirá en el 2024, mientras los crecimientos que descuenta actualmente el mercado son demasiado optimistas, tanto para Europa como para EE.UU.”, apunta Óscar Martínez, responsable de Gestión de Carteras en Norbolsa, quien recomienda invertir en sectores como el industrial, servicios de comunicación, tecnología, alimentación y salud.