Irizar cerró el pasado ejercicio 2023 con un récord de facturación de 895 millones de euros, un 40% más que en el año anterior. El futuro pinta aún más halagüeño para la firma de Ormaiztegi, que cuenta con más de 3.800 empleados -de ellos, 1.550 en sus tres plantas en Gipuzkoa-. De hecho, auguran llegar a los 970 millones durante el presente ejercicio. Irizar subrayó que “2023 ha sido el retorno a la generación de beneficios” y así, lograron superar ampliamente las previsiones.
“El resultado, independientemente, ha sido el doble de lo previsto, aunque tenemos que seguir trabajando en la mejora de eficiencia”, afirmaron desde Irizar, que augura un 2024 de cifras récord, gracias a una facturación consolidada del orden de los 970 millones de euros y una producción estimada de 3.700 vehículos, urbanos, interurbanos y larga distancia. De ellos, “330 serán eléctricos”. Calculadas las inversiones en “más de 20 millones”, estas sustentarán un crecimiento futuro que cuenta con una cartera de pedidos que le permite encarar 2024 y 2025 “con una visibilidad sin precedentes”.