GUÍA DE LA INNOVACIÓN EN EL PAÍS VASCO 2023 “Gipuzkoa tiene fortalezas para apostar por las economías del futuro”, Ane Insausti, diputada de Promoción Económica y Proyectos Estratégicos de la Diputación Foral de Gipuzkoa

Ane Insausti Diputada de Promoción Económica y Proyectos Estratégicos de la Diputación Foral de Gipuzkoa. Foto: DFG

La recién nombrada diputada de Promoción Económica y Proyectos Estratégicos de la Diputación Foral de Gipuzkoa, Ane Insausti, apuesta por la innovación, teniendo siempre en cuenta “el fin”, que es “lograr que el tejido empresarial guipuzcoano siga siendo competitivo” para abordar las grandes transformaciones a las que se enfrenta la sociedad. Los proyectos estratégicos que ha definido e implantado la institución foral como Mubil, Ziur, Adinberri o Cuántica dan una muestra de la implicación de la Diputación de Gipuzkoa en las economías del futuro, basadas en “las fortalezas que ya existen” en el territorio para, en definitiva, “garantizar el bienestar social”. 

¿Cuáles son los principales retos que afronta en esta legislatura?
El gran reto que tenemos es que nuestro tejido empresarial -recordemos que en Gipuzkoa el 60% del empleo está en empresas de 50 personas o menos- siga siendo competitivo en las transiciones tecnológica-digital, ecológica y demográfica. Y es importante entenderlo en el paraguas en el que estamos, en el que la incertidumbre ha venido para quedarse. Aunque la palabra no nos guste tenemos que empezar a sentirnos cómodos con ella y saber lidiarla. Eso nos exige ser cada vez más flexibles. La competitividad es inherente a garantizar el bienestar social. Y tenemos que hablar de estos retos en clave positiva, porque nos pone oportunidades encima de la mesa, nos permite como territorio hacer ciertas apuestas de economías del futuro sobre fortalezas que ya tenemos. 

“La competitividad del tejido empresarial guipuzcoano es inherente a garantizar el bienestar social”

El Plan Estratégico de Gipuzkoa 2024-2027 se define como un documento que marcará la hoja de ruta de la institución foral. ¿Supondrá un salto en el innovador proceso de gobernanza colaborativa?
Creo que tenemos que remontarnos a 2015, porque la base de Etorkizuna Eraikiz es la gobernanza colaborativa. Por lo tanto, la condición sine qua non del plan que se está elaborando será esa. Es la protagonista de cómo se quieren hacer las cosas, de recorrer el camino al que queremos llegar de forma colaborativa y que esto nos permita tener mayor probabilidad de acometer con éxito nuestra hoja de ruta. 

En el marco de este Plan, ¿cuáles son los proyectos prioritarios que aportará el departamento que dirige?
La hoja de ruta se está dibujando ahora mismo. No obstante, serán los que nos ayuden a tener más empleo de calidad, a ser más emprendedores, a apostar por la innovación en centros tecnológicos y en el ámbito empresarial. Y, por supuesto, ahí destacan nuestros proyectos estratégicos. 

ZIUR, Mubil o Adinberri son algunos de esos proyectos, ¿son imprescindibles para caminar hacia una nueva etapa en la competitividad de Gipuzkoa? 
Sí, sin duda. Tenemos unos retos muy importantes encima de la mesa y también oportunidades que debemos abordar para garantizar el futuro del tejido empresarial. Como territorio tenemos fortalezas en ciertos ámbitos y hay que aprovecharlas para asentar esas bases y ser capaces de construir la economía del futuro. Los proyectos estratégicos son un claro ejemplo. En el caso de Mubil se aborda la nueva movilidad, ligada con la transición ecológica; en Adinberri el envejecimiento, que se sitúa en la transición demográfica, y en ZIUR la ciberseguridad dentro de esa transición tecnológico-digital. A ellos hay que añadir Cuántica, un gran proyecto en el que tampoco se empieza de cero, porque el entorno lleva investigando mucho tiempo y tenemos a IBM que es una referencia a nivel mundial. 

¿La internacionalización es clave para garantizar la competitividad?
Una característica muy nuestra es que somos exportadores por naturaleza. Es nuestra realidad, pero no podemos ser conformistas, hay que seguir apostando por una presencia internacional mayor y por lograr un mayor peso con una propuesta basada en la innovación y la excelencia. En este sentido, podemos poner de ejemplo los proyectos estratégicos y también la máquina-herramienta guipuzcoana. Tenemos que tener un gran conocimiento que nos permita generar una apuesta de valor diferencial con un alto contenido tecnológico que, a su vez, nos posicione como un actor relevante en los ámbitos mencionados a nivel internacional. 

Todos estos proyectos están muy unidos a la estrategia RIS3. ¿Es fundamental este alineamiento?
En este caso, al igual que en el de la gobernanza colaborativa, es una condición sine qua non. Hay muchísimas oportunidades y batallas en las que queremos entrar, pero no es factible, no podemos apostar por todo. El RIS3 te da esa foto, te dice dónde están nuestras capacidades, en definitiva, dónde están nuestras apuestas a futuro. De ahí se derivan nuestros proyectos estratégicos.

El área que dirige tiene también como objetivo acompañar la transformación del tejido empresarial guipuzcoano hacia un modelo de empresa competitiva, diversificada y con presencia global. En este camino, ¿la innovación se antoja imprescindible?
Aquí lo importante no es hablar de innovación por innovación, sino que esta tenga un fin. El objetivo es ser capaces de poner encima de la mesa una propuesta de valor diferencial, en nuestro caso con un componente tecnológico importante, que hace que nos podamos posicionar de forma competitiva, que podamos tener el talento que necesitamos, que nuestro tejido empresarial y de centros tecnológicos sean capaces de poner productos innovadores en el mercado. 

“Tenemos que ser capaces de poner proyectos atractivos encima de la mesa por su componente tecnológico, por su temática y por su tamaño”

Acaba de mencionar el talento, que se ha convertido en una de las primeras preocupaciones de las empresas a nivel global. ¿Qué puede hacer la Diputación Foral de Gipuzkoa para retenerlo y traerlo al territorio?
Efectivamente es una situación global, pero dicho eso no podemos quedarnos de brazos cruzados. La clave está en ser capaces de poner proyectos atractivos encima de la mesa por su componente tecnológico, por su temática y por su tamaño. Un ejemplo de ello es Cuántica; a través de esta iniciativa el sexto ordenador cuántico a nivel mundial de IBM se va a situar en Donostia. Este tipo de proyectos atrae a personas que se han ido fuera, a perfiles que queremos que vengan aquí y logra que los que están con nosotros no se vayan. 

Gipuzkoa cuenta con un ecosistema basado en el conocimiento y en la innovación, con altas tasas de inversión en I+D. En este sentido, ¿cómo apoya la Diputación a este ecosistema? 
Lo primero es que tengamos una visión compartida, que vayamos todos a una. Esto no es un tema de que Diputación cree que la innovación es importante, es un ejercicio que tenemos que hacer todos a una. Tenemos la suerte de que nuestro tejido empresarial y los agentes socioeconómicos tienen claro que la innovación es totalmente necesaria. Esa visión es a largo plazo, una apuesta continuada. Gipuzkoa a día de hoy está como está por los años que se ha trabajado en este sentido. Por nuestra parte la apuesta por la innovación está en todas las direcciones, con ayudas tanto a centros tecnológicos como a agentes de I+D empresariales, con incentivos fiscales por parte del departamento de Hacienda y con nuestros propios proyectos estratégicos. Aquí también vemos necesaria la inversión público-privada como se ha puesto de manifiesto en Mubil, que abordará cuatro proyectos que son innovación en vena. Solos no podemos, pero de la mano con las empresas sí. Esa es la clave. 

LA MOCHILA

1. El primero, tener una visión compartida. Todos a una; o colaboramos y vamos en la misma dirección o los esfuerzos no darán sus frutos. 
2. Otro elemento fundamental en el campo de la innovación es que sea una apuesta a largo plazo y los proyectos estratégicos son un ejemplo de ello. 
Va a costar más pero el impacto será mayor. Nos estamos jugando mucho aquí. 
3. El tercer elemento sería que no se nos olvide por qué innovamos, que tenemos que tener un objetivo, el ser competitivos como territorio y buscar el bienestar social.

Más noticias de Actividad empresarial / Enpresa jarduera