El próximo 17 de octubre dará comienzo la 28 Semana de la Gestión Avanzada, un evento coordinado por Euskalit que se extiende a lo largo de 15 días del calendario y que de la mano de más de 50 entidades que participan organizando conferencias, debates y talleres, permite conocer las mejores prácticas y las últimas tendencias en gestión de empresas y organizaciones de todo tipo y sector.
Existe un amplio consenso en torno a la importancia que tiene la gestión como factor de competitividad y sostenibilidad de las organizaciones y hay estudios que relacionan claramente la mejora de la gestión con la mejora de los resultados empresariales, mostrando algunas evidencias relevantes, como que las prácticas de gestión representan más del 20% de la variación en la productividad, porcentaje similar o mayor que el de la I+D o las TICs., según un artículo de publicado en 2019 en la American Economic Review.  
Sólo por ello, ya merecería la pena intentar dotarse de una gestión avanzada. Pero, además, en el enfoque, las prácticas, herramientas y metodologías que engloba la Gestión Avanzada podemos encontrar soluciones para afrontar la enorme magnitud de los retos a los que se enfrentan las empresas y organizaciones actualmente.
Necesitamos aumentar la inversión y el esfuerzo en innovación, pero necesitamos saber cómo, puesto que no es suficiente desarrollar innovaciones puntuales, sino que es necesario convertirnos en organizaciones innovadoras, y para ello, es fundamental la innovación de procesos que nos permita dotarnos de las estructuras y las dinámicas de trabajo que nos faciliten obtener desarrollos significativos de manera continuada en el tiempo, así como estimular que las personas sean más creativas e innovadoras y contribuir a crear el ecosistema que facilite, alimente y proteja todo ello. 
Necesitamos transformar digitalmente nuestras organizaciones y el reto es hacerlo contando con la participación de las personas, desarrollando procesos a través de los cuales sean las personas las que identifique necesidades y oportunidades no resueltas y diseñen e implanten las soluciones. Al hablar de transformación digital no debemos olvidar que el elemento más potente del término no es el carácter digital, que es importante, sino la transformación a la que aspira, que es lo que define ese cambio radical, profundo, transversal, que requieren las organizaciones para no perder el paso en este mundo de cambios acelerados y no fácilmente previsibles, y que tiene en la tecnología una palanca muy relevante, pero que pivota alrededor de la Estrategia de las organizaciones. 
Necesitamos identificar, atraer y retener el talento, y para ello debemos hacer atractivas nuestras organizaciones, nuestras ciudades, nuestro entorno y sociedad. Debemos hacerlas más inclusivas, gestionar la diversidad, hacerlas más abiertas a la participación. Tenemos que conocer más profundamente las necesidades y expectativas de las personas, las tendencias del empleo y las nuevas formas de trabajo, así como las competencias que requieren los nuevos modelos de negocio y de organización.
Necesitamos conocer los impactos positivos y negativos que nuestras actividades generan en la sociedad y en el medio ambiente, identificar mejoras y oportunidades para avanzar hacia formas de producción y consumo más sostenibles y contribuir a construir un mundo mejor, formado por organizaciones, empresas, instituciones y personas responsables y comprometidas con el logro de una sociedad más justa, pacífica e igualitaria. Los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Agenda 2030 nos marcan unos objetivos y son una valiosa guía, tanto para la ciudadanía como para las empresas y organizaciones.  
De todo ello, de innovación de procesos, de transformación digital, de personas y talento, de desarrollo sostenible y competitividad… en definitiva, de Gestión Avanzada, veremos en la Semana Europea multitud de ejemplos y buenas prácticas para conocer, aprender y avanzar, pues estamos convencidos de que el desarrollo de la Gestión Avanzada es uno de los factores clave para dar respuesta a los retos actuales y urgentes de nuestras empresas, organizaciones y sociedad en la búsqueda de una competitividad sostenible.