El País Vasco se ha convertido en los últimos años en una firme apuesta de Redeia para ser un enlace clave de la conexión energética en el norte peninsular. Prueba de ello es que la marca corporativa de Red Eléctrica Española prevé invertir cerca de 1.000 millones hasta 2027 para poder reforzar la interconexión eléctrica con infraestructuras adecuadas que desarrollen una red de transporte eléctrico eficiente en el País Vasco, según consta en el documento de Planificación 2021-26 de la Red de Transporte de Electricidad, elaborado por la entidad.
Entre los proyectos en curso destacan una actuación en el eje norte, como es el caso de la línea Güeñes (Bizkaia)-Itsaso (Gipuzkoa), que aportará un tendido de alta tensión de 400 kV y que para su ejecución supondrá una inversión de 400 millones de euros. En lo que respecta a las últimas actuaciones acometidas por Redeia en esta línea, cabe destacar la renovación realizada en la subestación de Itxaso, de 220 kV, que facilitará la integración de las energías renovables en la red.

{ Beneficios

Las conexiones Güeñes-Itsaso y la línea entre Castejón y Muruarte favorecerán la eficiencia en el suministro eléctrico.

Dicha subestación conectará también con la línea en Navarra de Castejón y Muruarte, que dispone también de un presupuesto de 70 millones de euros para su ejecución. Esta infraestructura permitirá aumentar la capacidad de evacuación de energía y facilitar una mayor integración de energías renovables, así como asegurar los valores comprometidos de capacidad de intercambio entre España y Francia.

En este mismo territorio, se han ampliado las subestaciones La Serna y Castejón (400 kV) y Olite (220 kV), para facilitar la integración de las energías renovables en la red, así como la de Muruarte (220 kV).