Euskadi quiere mejorar el comportamiento energético de 2.000 pisos sociales

El 18% de las solicitudes de servicio de mejora de la vivienda recibidas el pasado mes de enero tuvieron incidencia directa en la eficiencia energética de los inmuebles, según los datos del Informe sobre el Sector de la Reforma del primer mes del año, editado por Habitissimo. Los datos facilitados por esta plataforma digital confirman la tendencia al alza de los usuarios por mejorar su vivienda en este aspecto, que ya se registraba a finales de 2020, cuando este tipo de solicitudes alcanzaron el 17%.
En Euskadi, la Viceconsejería de Vivienda del Gobierno vasco, la Asociación de Gestores Públicos de Vivienda y Suelo (AVS) y las principales entidades sociales de vivienda de la comunidad autónoma (Alokabide, Donostiako Etxegintza, Sestao Berri y Viviendas Municipales de Bilbao) han puesto en marcha de manera conjunta el proyecto piloto ‘e-lagun’, cuyo objetivo es conseguir un modelo de gestión integral de la energía en la vivienda pública de Euskadi, que garantice la optimización de los recursos existentes y el mayor confort para las personas inquilinas al menor coste posible. El Gobierno vasco y las entidades de vivienda social están estudiando el comportamiento energético de casi 2.000 viviendas de su propiedad, agrupadas en 500 puntos de suministro de elementos comunes –de garajes, ascensores, luz de la escalera, etc.– y repartidas en 150 edificios ubicados en Barakaldo, Bilbao, Donostia, Sestao y Vitoria-Gasteiz. El mayor aporte lo realiza Alokabide, la sociedad dependiente del Departamento de Vivienda, con 1.000 pisos, seguida de Viviendas Municipales de Bilbao, con 458 viviendas y 37 locales y de Donostiako Etxegintza y Sestao Berri, con 200 cada una.

En ‘e-lagun’ participan el Gobierno

vasco, y las principales entidades

sociales de vivienda

El análisis de los suministros comunes de los edificios ha llegado a su ecuador, con 240 contratos analizados y ahorros anuales detectados por valor de 60.000 euros. En ellos se han impulsado trámites para mejorar y optimizar los contratos y se ha mantenido la vigilancia posterior, para detectar desviaciones de consumo u otras posibles mejoras.

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