Una delegación de la Diputación Foral de Gipuzkoa, encabezada por el diputado general, Markel Olano, ha viajado a Bruselas (Bélgica) para presentar ante las instituciones europeas Etorkizuna Eraikiz, la apuesta que se está llevando a cabo en Gipuzkoa por responder a los restos de futuro del territorio de forma colaborativa. La iniciativa ha conseguido el respaldo de la Comisión Europea que, por boca de su vicepresidenta Dubravka Šuica, ha refrendado la apuesta que está liderando la institución foral. La mandataria europea ha puesto a Etorkizuna Eraikiz como ejemplo de innovación social, y ha considerado que los resultados obtenidos hasta la fecha son un claro ejemplo del potencial que atesora el proyecto. 
La presentación se ha llevado a cabo en la delegación de Euskadi para la Unión Europea, y ha contado con participantes internacionales de primer nivel, entre ellos y ellas responsables de diferentes áreas de instituciones comunitarias y personas expertas del ámbito académico. El propio diputado general ha sido el encargado de exponer el origen, la trayectoria, la situación actual y los pasos futuros que dará Etorkizuna Eraikiz, y ha comenzado su alocución ofreciendo una breve descripción de Gipuzkoa. “Podemos decir que Etorkizuna Eraikiz nació sobre suelo fértil o que, al menos, nuestro territorio presentaba ya de saque varias fortalezas a tener en cuenta”, entre las que ha citado el carácter industrial del territorio, el sistema de protección social, la colaboración público-privada, la pujanza del denominado Modelo Gipuzkoa, el contar con competencia fiscal o la identidad vasca de Gipuzkoa, entre otros factores. 
Sin embargo, ha advertido que Gipuzkoa no era ni es ajena a una serie de desafíos que ponían y siguen poniendo en riesgo la continuidad del modelo socioeconómico del territorio. “Etorkizuna Eraikiz se presenta en sociedad en 2016, en un contexto internacional de creciente desafección política y en la antesala del renacer de los populismos y las ideologías extremistas”, ha recordado. Según ha añadido, la lectura que se hizo entonces era que, “aunque no había recetas ni fórmulas mágicas, teníamos que intentar hacer algo distinto para revertir la situación”. “Por tanto, en 2016, decidimos que Gipuzkoa no iba a quedarse de brazos cruzados mientras veíamos cómo nuestro sistema político e institucional se iba desgastando más y más”, ha señalado. 
Así, ha señalado que, a través de Etorkizuna Eraikiz, Gipuzkoa apostó y sigue apostando por una nueva cultura política basada en la colaboración entre todo tipo de agentes: “Etorkizuna Eraikiz invita a la participación y la implicación en la política como método para alejar extremismos y tender puentes con una sociedad organizada y una ciudadanía que, en general, parece observar con recelo a la clase política y a las administraciones públicas”. En su presentación, según ha recordado Olano, el proyecto se aliaba de inicio con las universidades y lanzaba el guante tanto a la ciudadanía como a la sociedad organizada.

Resultados
Durante los seis años de trayectoria de Etorkizuna Eraikiz, el proyecto ha tratado de responder a diversas preguntas complejas, articulando para ello un ejercicio colectivo de reflexión, puesta en común de ideas y propuestas de soluciones. “En este esfuerzo se han implicada más de 1.500 empresas, asociaciones, agentes de conocimiento y entidades de todo tipo, y en mayor o menor grado, han participado en el proyecto más de 68.800 personas”, ha destacado el responsable foral. Desde un punto de vista cuantitativo, Etorkizuna Eraikiz ha conseguido articular y poner en marcha 11 estrategias y centros de referencia en ámbitos considerados como de capital importancia para el futuro del territorio, tales como la nueva movilidad, la lucha contra el cambio climático o el envejecimiento poblacional. 
“A través de estas líneas de acción, se busca dar respuesta a los retos de futuro más importantes que se le presentan al territorio, para también convertir la amenaza en oportunidad y aumentar el grado de especialización de Gipuzkoa en estas cuestiones. Intuimos que estos sectores de futuro pueden ser los pilares de la economía del futuro”, ha remarcado. Junto a ellos, Etorkizuna Eraikiz mantiene activos 46 proyectos experimentales, en los que están implicados agentes de todo tipo y tienen como fin probar en entornos reales diferentes soluciones para cuestiones complejas, como pueden ser los nuevos modelos de atención a las personas mayores o experimentar en torno a cuestiones como la conciliación o la relación entre generaciones. 
La sociedad organizada, por su parte, recibe cada año la invitación a presentar, de un modo libre, sus propuestas innovadoras y experimentales para hacer frente a cuestiones de futuro. Hasta la fecha, Etorkizuna Eraikiz ha contribuido a financiar 150 de estas experiencias. “Junto a ello, hemos abierto canales directos de participación para la ciudadanía: las asambleas ciudadanas, que estamos llevando a cabo en colaboración con la OCDE”, ha explicado. Se trata de procesos experimentales de democracia deliberativa organizados por la administración pública y en los que participan ciudadanos y ciudadanos elegidos por sorteo. “El objetivo es implicarles en la búsqueda de soluciones para retos de futuro que tienen respuestas complejas. Hasta la fecha, hemos llevado a cabo dos, uno en Tolosa y otro a nivel de territorio”, ha remarcado.
Además de todo ello, Etorkizuna Eraikiz se ha abierto al mundo a través de su dinámica de internacionalización, mantiene constantemente canales de comunicación y participación directos con la ciudadanía y ha consolidado un potente think tank, asentado como espacio de reflexión y debate sobre el rumbo que debe tomar Gipuzkoa y que sirve también para detectar amenazas y proponer soluciones a los retos del territorio.
“Etorkizuna Eraikiz ha conseguido erigirse, en definitiva, como toda una llamada a la acción ante un mundo cada vez más cambiante y diverso”, ha defendido Olano. A su juicio, el proyecto propone pasar de las palabras a los hechos, y ofrece un espacio de participación y de experimentación idóneo para la construcción de la Gipuzkoa del futuro y que, “a fuerza de hechos, está consiguiendo superar recelos y achicar espacio entre política y ciudadanía”. “Abriendo de par en par las puertas de la participación a la ciudadanía e implicándola en la búsqueda de soluciones, conseguimos que mejore su grado de conocimiento sobre las administraciones públicas y la política, y les hacemos partícipes directos del esfuerzo colectivo que estamos haciendo para hacer frente a los grandes retos de futuro que afronta nuestro territorio. Y esto, a medio y largo plazo, significa una mejora de la confianza y una reducción del alejamiento ciudadano y, por extensión, un fortalecimiento de nuestro sistema democrático”, ha concluido. 

La jornada
La presentación del encuentro la ha dado María José Canel, catedrática de Comunicación Política y Sector Público de la Universidad Complutense de Madrid). Tras ella ha tomado la palabra Markel Olano, y posteriormente la vicepresidenta de la Comisión Europea, que ha precedido la ponencia del profesor Geert Bouckaert, de la KU Leuven University. A continuación, se ha llevado a cabo una mesa redonda en torno a la importancia de la gobernanza colaborativa, moderada por Marta Marín, delegada de Euskadi para la Unión Europea. En este foro han participado Toma Šutić; miembro del gabinete de la vicepresidenta de la Comisión Europea Dubravka Šuica; Jaume Duch, director general de comunicación del Parlamento Europeo; Adil Najam, del Frederick S. Pardee School of Global Studies, Universidad de Boston, Estados Unidos; la citada María José Canel; y Xabier Barandiaran, de la Diputación Foral de Gipuzkoa.
Después, se ha celebrado una segunda mesa redondo, que ha tenido como eje cómo se implementa la gobernanza colaborativa. El debate ha estado moderado por María José Canel, y han participado David Mair, jefe de unidad del Joint Research Centre, Comisión Europea; Daniele Dotto, jefe de unidad del DG Reform); Angela Hanson, de la OCDE; Eider Mendoza, diputada foral de Gobernanza de la Diputación de Gipuzkoa; y Miren Larrea, del Instituto Vasco de Competitividad Orkestra, de la Universidad de Deusto). La propia Mendoza ha sido la encargada de cerrar el acto, ocasión que ha aprovechado para hacer una recapitulación de las principales conclusiones extraídas a lo largo de la jornada.