El viceconsejero de Empleo e Inclusión, Alfonso Gurpegui, destacó 
el papel que la nueva Ley Vasca de Empleo, que se aprobará en el Parlamento este otoño, va a otorgar a los ayuntamientos a los que, por primera vez, va a reconocer su función con garantía de recursos financieros. 
Gurpegui tomó parte el 29 de septiembre en Donostia-San Sebastián en la presentación del Plan de Empleo de la capital guipuzcoana junto a la teniente de alcalde y concejala de Impulso Económico y Empleo, Marisol Garmendia. Tras recordar que la estrategia desplegada por las diferentes instituciones en materia de empleo está dando sus frutos, con un primer semestre del año excepcional en el que la tasa de desempleo se situó en el 7,4% y se logró superar el millón de cotizantes a la Seguridad Social, el viceconsejero puso en valor la colaboración con los ayuntamientos para ofrecer oportunidades a todas las personas. En este sentido, aseguró que “no se trata solo, de conseguir un empleo, sino de conseguir un mejor empleo, más seguro y mejor pagado”, y en ese objetivo enmarcó el trabajo del Servicio Público Vasco de Empleo - Lanbide junto a las instituciones y los agentes económicos y sociales. 
Gurpegui destacó, además, el impulso que la próxima Ley Vasca de Empleo va a dar al papel de los ayuntamientos en el ámbito del empleo, y es que “por primera vez va a reconocer expresamente la función municipal con garantía de recursos financieros bajo la dirección de Lanbide”. El viceconsejero recordó que la ley, que se encuentra en su fase final en el Parlamento Vasco y será aprobada este otoño, “va a ampliar derechos de ciudadanía porque todas las personas, paradas y ocupadas, van a tener garantizado ese acompañamiento personal desde Lanbide, y porque el acceso a un empleo o el poder aspirar a uno mejor con más formación no puede depender del bolsillo de cada cual”. 
Asimismo, apuntó que va a contribuir a reforzar lo público, el servicio de Lanbide, “porque sólo desde lo público se garantizan derechos, y va a organizar mejor a todos los agentes institucionales, sociales y económicos que actuamos en esta materia, para ser más eficaces con una particularidad añadida: los ayuntamientos van a tener un papel reforzado, además de los recursos financieros adecuados”. 
Se trata de una ley, concluyó, que va a suponer una oportunidad única para regular las políticas activas de empleo que tenemos desde hace más de una década, ordenando el espacio, ofreciendo un papel para cada institución o agente económico y social, y convirtiendo la apuesta por la orientación y la activación laboral en un derecho, y en esa red, los ayuntamientos son imprescindibles”.