El laboratorio de fuego de Gaiker-IK4, acreditado para nuevos ensayos
- Estrategia Empresarial
- 17-Febrero-2014
El laboratorio de fuego de Gaiker-IK4 ha logrado otra acreditación. (Gaiker-IK4)
Durante el mes de enero, Gaiker-IK4, que lleva ensayando materiales para el sector ferroviario desde 1992, amplió el alcance de su acreditación ENAC 72/LE 187, con la que cuenta desde 1995, para la realización de ensayos de reacción al fuego dirigidos al sector de la construcción y el ferroviario. La ampliación lograda le convierte en el único laboratorio nacional certificado para evaluar la densidad de humos y la toxicidad de los gases de forma simultánea.
El sector ferroviario es particularmente exigente en lo que respecta a la seguridad en caso de incendio. Concretamente, las exigencias relativas a la densidad y a la toxicidad de los humos generados durante la combustión, son superiores a las requeridas, por ejemplo, en los materiales aplicados al sector de la construcción o los empleados en la fabricación de autobuses. Esto se debe a la complejidad que plantea la evacuación de un tren en caso de fuego y al hecho de que estadísticamente, el fallecimiento de viajeros suele deberse más a la imposibilidad de encontrar la salida o a su intoxicación por humos densos y nocivos, que al propio fuego. La densidad y la toxicidad son, por tanto, parámetros clave a controlar en la combustión de materiales destinados a la fabricación de trenes.
La UE unificó los requisitos regulatorios para el sector ferroviario en marzo de 2013. La nueva norma EN 45545:2013, que regula el comportamiento al fuego de los materiales, el equipamiento eléctrico y las instalaciones dirigidas a este sector— es más estricta que la norma nacional que regía el sector en España y, en la actualidad, sólo una docena de los entidades preparadas en Europa para ensayar los productos de acuerdo con la nueva regulación europea vigente, están reconocidos por sus respectivas entidades acreditadoras.
El sector ferroviario es particularmente exigente en lo que respecta a la seguridad en caso de incendio. Concretamente, las exigencias relativas a la densidad y a la toxicidad de los humos generados durante la combustión, son superiores a las requeridas, por ejemplo, en los materiales aplicados al sector de la construcción o los empleados en la fabricación de autobuses. Esto se debe a la complejidad que plantea la evacuación de un tren en caso de fuego y al hecho de que estadísticamente, el fallecimiento de viajeros suele deberse más a la imposibilidad de encontrar la salida o a su intoxicación por humos densos y nocivos, que al propio fuego. La densidad y la toxicidad son, por tanto, parámetros clave a controlar en la combustión de materiales destinados a la fabricación de trenes.
La UE unificó los requisitos regulatorios para el sector ferroviario en marzo de 2013. La nueva norma EN 45545:2013, que regula el comportamiento al fuego de los materiales, el equipamiento eléctrico y las instalaciones dirigidas a este sector— es más estricta que la norma nacional que regía el sector en España y, en la actualidad, sólo una docena de los entidades preparadas en Europa para ensayar los productos de acuerdo con la nueva regulación europea vigente, están reconocidos por sus respectivas entidades acreditadoras.