El Gobierno vasco aprobó en su Consejo del pasado 20 de diciembre las directrices económicas para la elaboración de los Presupuestos de 2017, que el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, espera que se remitan a la Cámara para el 23 de febrero y puedan estar aprobados en el primer cuatrimestre del año y que, según reconoció, no tendrán “mucho crecimiento”.
El consejero Azpiazu señaló que no podrán hacer “un Presupuesto tan alegre como el que nos gustaría hacer”, teniendo en cuenta que los ingresos previstos “no dan muchas alegrías” o que estarán sujetos también a otras “restricciones”, como el cumplimiento del déficit o los límites para el crecimiento de gasto. Pero ello no impedirá que “cumpla con las prioridades y los objetivos prioritarios” del Gobierno. .
Las directrices aprobadas incluyen un análisis del entorno en el que se desarrolla la acción de Gobierno, se perfila el contexto macroeconómico para los años 2016 y 2017, se abordan las implicaciones del marco de estabilidad presupuestaria, se contemplan los objetivos estratégicos de la acción de Gobierno y se incluyen los criterios presupuestarios para la concreción de la Cuentas.

Crecimiento
Pedro Azpiazu indicó que se diseñarán unos Presupuestos “coherentes” con el escenario macroeconómico y responderán al doble criterio “de garantizar, por un lado, la satisfacción de las necesidades básicas de las personas y de actuar como palanca de crecimiento y creación de empleo”.
Así, se apoyarán las estrategias dirigidas a fomentar la competitividad de la economía, con medidas para la internacionalización de sus empresas -a través del apoyo a la Estrategia Basque Country- o el impulso de la estrategia de innovación contemplada en el PCTI Euskadi 2020. El apoyo al sector industrial se verá acompañado del apoyo a otros sectores de actividad como el comercio, la hostelería, el turismo y el sector primario”.