Los principales puertos comerciales vascos –Bilbao y Pasaia– continúan en la senda de crecimiento iniciada el pasado año. Hasta el mes de agosto el tráfico total de mercancías en el Puerto de Bilbao se había acercado a los 21,5 millones de toneladas, aumentado un 6,95%, aunque este crecimiento se debió a los graneles líquidos operados en la refinería de Petronor. Sin embargo, en cuanto a la carga seca, los tráficos registraron una bajada acumulada del 1,7% durante los ocho primeros meses del año. Esta disminución se debió principalmente, según la Asociación de Consignatarios de Buques y Estibadores, “a la pérdida de competitividad del Puerto de Bilbao en relación con los puertos competidores por los altos costes de operación que deben afrontar las empresas estibadoras”. En Pasaia, el tráfico había crecido hasta agosto un 10,2% con respecto al mismo período del año pasado, según la Autoridad Portuaria.