El PIB del País Vasco se acelerará en 2022 hasta el 5,3%, una subida que podría moderarse hasta el 4,5% en 2023. De cumplirse las previsiones, se crearían 56.000 empleos en estos dos años. Esta es la previsión que realiza BBVA Research, cuyo responsable, Rafael Doménech, estima que el control de la pandemia, la utilización del ahorro embalsado por las familias, el impulso en la ejecución de los fondos NextGenerationEU (NGEU) y una elevada capacidad productiva todavía sin utilizar compensarán los efectos de los cuellos de botella y del encarecimiento de la energía en la primera mitad del año.

De hecho, puede darse a corto plazo una variación al alza de las estimaciones de crecimiento si se confirma el menor impacto que ha tenido la pandemia en la actividad durante el mes de enero. A medio plazo, el sesgo dependerá de las reformas que se adopten en los próximos meses.
En cualquier caso, Doménech advierte de que habrá que estar muy atentos a los riesgos geopolíticos y a los asociados a una mayor inflación y a las subidas de los tipos de interés por parte de los bancos centrales. Además, es necesario acelerar la implementación de los fondos relacionados con el NGEU.