Las obras de la variante del Topo en Donostia progresan adecuadamente, según confirmó el consejero Iñaki Arriola, que visitó el tajo y comprobó in situ los avances.

El Departamento de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes, a través de Euskal Trenbide Sarea, ha concluido las obras del tramo Lugaritz-Miraconcha de la variante ferroviaria del Topo, a excepción del montaje de la vía y la catenaria, que se llevará a cabo de forma conjunta con el tramo Miraconcha-Easo, actualmente en ejecución. Tras la visita realizada a la futura estación de Bentaberri, el consejero Iñaki Arriola explicó que el tramo que discurre entre Lugaritz y Miraconcha tiene una longitud de 2.140 metros y alcanza una profundidad máxima de 83 metros. En la estación de Bentaberri, la única que incluye este tramo, ETS ha finalizado ya la obra civil y los accesos mecanizados (escaleras y ascensores) del metro que discurre entre Lugaritz y Miraconcha. Solo resta el montaje de las vías, la catenaria y el resto de instalaciones, que se realizará de forma conjunta a la finalización del tramo 2.

Por lo que respecta al tramo Miraconcha-Easo, en el frente de la playa restan alrededor de 200 metros para llegar a la estación y, aunque de manera lenta pero segura, los rendimientos son buenos. “Avanzamos en tramos de seis metros. Se trata el terreno con inyecciones y se excava por fases, tal y como está definido en el proyecto y aprobado por la Dirección de Costas y el Cedex”, aseguró Arriola. Mientras tanto, en la futura estación de Easo, se trabaja en el montaje del carro de portaencofrados para llevar a cabo el revestimiento estructural con hormigón definitivo. En superficie, las obras de los cañones de acceso de Loiola y Xabier Zubiri, en distintos grados de ejecución, siguen su curso.