Aernnova se asocia con Radia para diseñar y fabricar el WindRunner, el avión más grande del mundo
Aernnova colaborará con Radia en el desarrollo y diseño del ala y los soportes de unión (pylons) de los motores al avión
- Estrategia Empresarial
- 19-Julio-2024
Radia, ubicada en Colorado (USA) diseña el avión más grande del mundo para transportar palas eólicas terrestres gigantes y altamente eficientes, desarrollando la energía eólica y favoreciendo los objetivos climáticos. Foto: Aernnova
Aernnova se asocia con Radia en el proyecto WindRunner, el avión más grande del mundo. Radia está desarrollando WindRunner, para transportar palas eólicas más grandes y eficientes, ampliar el alcance de la energía eólica y transformar la economía, buscando el cumplimiento de los objetivos climáticos. De este modo, Aernnova se unirá al ecosistema de innovación de Radia, según anunciarán conjuntamente, en el Salón Aeronáutico Internacional de Farnborough 2024. La vasca Aernnova se ocupará del diseño del ala y de los “pylons” de los motores del avión.
El CEO de Radia Mark Lundstrom asegura «WindRunner es una oportunidad para que la industria aeroespacial tenga un impacto decisivo en el cambio climático, se diversifique en la industria energética y aproveche una enorme oportunidad de mercado», y añadió «Nos complace e ilusiona que Aernnova, empresa a la vanguardia del diseño, el desarrollo y la ingeniería aeroespacial haya decidido asociarse con nosotros en este proyecto de importancia crítica.»
Por su parte Ricardo Chocarro, CEO de Aernnova se expresó en los siguientes términos “Estamos entusiasmados y orgullosos de participar en el avión más grande del mundo, especialmente teniendo en cuenta su misión. Basándome en mi experiencia previa en el sector de la industria de aerogeneradores, puedo afirmar la importancia de la solución que aporta WindRunner. El acuerdo con Radia para el desarrollo del proyecto, nos posiciona como punteros para el soporte de diseño y fabricación del ala y los pylons de unión con el motor, en un proyecto claramente ambicioso.”
Los acuerdos de colaboración son el último paso de WindRunner, una aeronave diseñada con un objetivo fundamental: transportar grandes palas de aerogenerador, de hasta 105 m de longitud, más largas que un campo de fútbol, directamente a los emplazamientos de los parques eólicos, aterrizando en pistas de tierra semipreparadas de tan sólo 1.800 m (6.000 pies). Superará las barreras logísticas que hoy impiden la expansión de la energía eólica terrestre. Las turbinas eólicas son más eficaces y eficientes cuanto más grandes son. Pero las palas largas son muy difíciles y caras de transportar por tierra porque se interponen en el camino obstáculos como puentes, túneles y curvas.
WindRunner volará por encima de estos obstáculos, permitiendo el despliegue de los aerogeneradores terrestres más grandes y eficientes de la actualidad y de los previstos aún mayores en el futuro, lo que Radia denomina GigaWind.
El resultado será la disponibilidad generalizada de energía limpia constante y de bajo coste en más lugares y a escala industrial para la red, la producción de combustible ecológico, incluido el combustible de aviación sostenible (SAF), y los usuarios de energía comercial, como los centros de datos y los hiperescaladores. Se calcula que el mercado de la energía eólica terrestre alcanzará los 10 billones de dólares en 2050, hasta un millón de aerogeneradores.