La innovación universitaria tiene dos componentes: el educativo (la mejora del modo en que formamos al alumnado, teniendo en cuenta las demandas presentes y anticipando las demandas futuras de la sociedad) y la transferencia de resultados de investigación a la sociedad. El primero requiere acercar la formación a la realidad laboral, haciendo hincapié en la formación dual universidad-empresa, y trabajando con flexibilidad para responder a la necesidad de formación continua y especializada. En 2016 concertamos 120 contratos con 50 instituciones y empresas, solo atendiendo la demanda de ese tipo de formación. El segundo componente, innovar tra