El sector de la salud tiene pendiente una profunda transformación que abarca tanto a las infraestructuras necesarias, a los aspectos organizativos, a los procesos clínico-asistenciales, a los modelos de gobierno y relación, como a los modelos de financiación, todos ellos enmarcados dentro una estrategia global, clara, concreta y progresiva en la que las nuevas tecnologías clínicas juegan un papel fundamental como facilitador del cambio y la innovación. Las infraestructuras y los modelos de prestación de servicios asistenciales están pensados actualmente para dar respuesta a episodios de patologías agudas, no siendo los más adecuados para sa