El origen de Astigarraga Kit Line se remonta a 1983, año en el que Juan José Astigarraga abrió un pequeño taller para fabricar caballetes de madera maciza de pino. Tal fue el éxito de ese producto que en 1985, incitado por sus propios clientes, en su mayoría franceses, llevó a cabo la primera ampliación y, junto a su hija Itziar, empezó a desarrollar el incipiente mercado del bricolaje en España, siempre con la madera local como seña de identidad. En muy pocos años la compañía contaba ya con un extenso porfolio de productos de madera para la ordenación y decoración, logrando una óptima reputación en los mercados francés y español. Con esos