El fondo PHI ha firmado la venta de su participada Capresa, Calibrados de Precisión SA, dedicada al tratamiento del acero para el sector de la automoción, a la compañía vasca Sidenor. Capresa, con planta en La Llagosta (Barcelona), emplea a 52 personas y cerró el año pasado con unas ventas de unos 26 millones de euros y más de dos millones de beneficio de explotación (Ebitda) y, en la actualidad, se encuentra en pleno proceso de expansión después de haber atravesado por un periodo de restructuración.
Su producción se estima en cerca de las 35.000 toneladas de acero al año que tienen como destino al sector de componentes de automoción y algo más del 50% de sus venta se concentran en la exportación.
La actividad que desarrolla es complementaria a la de Sidenor en el área de calibrado y permitirá a la compañía vasca ampliar su capacidad para comercializar productos más acabados y por lo tanto de mayor valor añadido.

Por su parte, Sidenor, que desde el 2016 es propiedad de su equipo directivo, tiene una planta en Catalunya, en Polinyà (Barcelona), también de calibrado de acero. Con la compra de Capresa, pretende reforzar su negocio en la industria de la automoción, que ya es su principal mercado. Sidenor, con 2.200 empleados, facturó 670 millones en el 2016, con un beneficio de 2,7 millones, y es líder en la producción de aceros largos especiales y uno de los principales fabricantes mundiales de piezas forjadas y fundidas, además de un importante proveedor de productos de calibrado en el mercado europeo.