Rolls-Royce se encuentra en proceso de compra del 100% de Industria de Turbo Propulsores (ITP), al hacerse, ahora hace un año, con la participación del 53,1% de Sener. El proceso de pago, por el que la compañía británica desembolsará 720 millones de euros, se prolongará durante dos años. El acuerdo ofrece flexibilidad para liquidar hasta el 50% del pago en forma de acciones de Rolls-Royce.
Esta adquisición ha afectado positivamente a la compañía ITP, que en el pasado año registró un volumen de negocio de 780 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 9,9%, en línea con las previsiones contempladas en el Plan Estratégico ITP 2020.
Además, ITP continuó aumentando su inversión en I+D en 2016, con un esfuerzo de 67 millones de euros en este apartado (57 millones en 2015), lo que continúa situando a ITP como una de las primeras compañías estatales con mayor inversión en relación a sus ventas.
El resultado de explotación alcanzó los 67 millones de euros, lo que supone un aumento del 5,5% con respecto al ejercicio anterior y una rentabilidad del 8,6% sobre ventas. Está previsto que la sede central de ITP continúe en Zamudio y no implica deslocalización alguna ni cambios sustanciales para la plantilla, que a cierre de 2015 la integraban 3.113 personas, de ellas 2.258 en España. Por su parte, PCB, filial de ITP, mantendrá su Plan Estratégico a 2021, que contempla inversiones por 20 millones y 200 empleos.
La adquisición reforzará la posición de Rolls-Royce en los programas de crecimiento de grandes motores de su división Civil, entre los que se incluyen los motores Trent 100 y XWB y amplía las capacidades de fabricación y de servicios del grupo, agregando valor al sector de Defensa.