Petronor ha concluido recientemente la parada que inició el pasado 2 de febrero para la revisión de las instalaciones productivas del área de conversión.

La refinería ha invertido 42 millones de euros y ha incorporado a 1.200 trabajadores de unas 40 empresas contratistas para estos trabajos. En una visita de los medios de comunicación a las instalaciones de la refinería en Muskiz, el jefe del área de Conversión, Elías Unzueta, que estuvo acompañado del responsable de Relaciones Institucionales, Gualber Atxurra, indicó que, además de las revisiones del día a día, cada cinco años se llevan a cabo paradas en la producción de las diferentes áreas de la planta, con el fin de revisar torres, recipientes, hornos, válvulas de seguridad, máquinas, instrumentación, y subestaciones eléctricas.
De esta forma, según avanzó Unzueta, la próxima parada se producirá en 2016 y afectará a la unidad de URF (Unidad de Reducción de Fuelçoleo), que se construyó en 2011, así como a varias unidades del área de conversión, ahora en funcionamiento; entre ellas, la torre de 224 metros de altura, la más alta de toda la refinería. Durante la parada recién culminada del área de conversión, “la más grande en cuanto a inversión, impacto y personas trabajando”, Petronor incorporó a 1.200 trabajadores de unas 40 empresas. Más del 60% de las empresas contratadas en la parada fueron locales y el 40% restante, de empresas especializadas en el mundo del petróleo y las refinerías que proceden, algunas de ellas, de Europa y Estados Unidos.

De estreno
Todos los trabajadores, habituales de Petronor y temporales, recibieron formación específica en seguridad. Durante la parada, se llevaron a cabo importantes inversiones en la mejora de la eficiencia energética de las instalaciones, en fiabilidad de los equipos, una actualización tecnológica y mejora de la mantenibilidad, así como un incremento de la producción de gasolinas y de hidrógeno.
Al término de la parada, se puede decir que Petronor estrena unas instalaciones industriales, con 928 empleos directos, más de 6.000 indirectos y cuyo peso en la producción de Euskadi es del 9,7%.