Petronor va a comenzar una nueva andadura como biorrefinería procesando cinco millones de litros de aceite vegetal de palma. El producto final de este innovador proceso se incorporará en la formulación de gasóleo de automoción, gasóleo A, por lo que, en su consumo, el balance de emisión de CO2 será de cero.
El aceite de palma procede de una fuente de energía renovable, como son los cultivos de oleaginosas no dedicados a la alimentación humana. Las oleaginosas de alimentación han sufrido un incremento de precio debido a la competencia del mercado de los biocombustibles, encareciendo el acceso a la alimentación de muchas comunidades con base alimentaria en la soja, el maíz y el mijo. Por eso, Petronor solo compra aceite de palma o de jatrofa. En este sentido, Repsol ha realizado ya cultivos experimentales de jatrofa para incrementar su producción, con el fin de no competir con cultivos alimentarios.
Petronor se convierte así en pionero en comportamientos sostenibles estrenándose como biorrefinería.