Una de las máximas preocupaciones que trae la nueva revolución industrial es la del mercado laboral. Los nuevos modelos industriales van a suponer la desaparición de trabajos tradicionales, pero al mismo tiempo, la aparición de otros empleos vinculados a nuevos perfiles profesionales. En la solución a esta dicotomía está la clave para intentar que el impacto laboral de la industria avanzada sea positivo.
La Industria 4.0 va a suponer la transformación del empleo industrial. Además la industria va a necesitar incorporar un nuevo talento, el digital, que hasta ahora no veía una oportunidad de futuro en este sector. Diversos informes económicos apuntan que la digitalización de la industria supondrá la desaparición de 7,1 millones de empleos en todo el mundo para 2020, fundamentalmente en economías intensivas en mano de obra, y la creación de 2,1 millones de nuevos puestos de trabajo. Y ocho de cada 10 jóvenes de entre 20 y 30 años encontrarán un empleo relacionado con el ámbito digital en trabajos que aún no existen.
Por ello, en el caso de Euskadi, la Formación Profesional y universitaria, permanente y de alto valor añadido, se antojan imprescindibles si se quiere afrontar con éxito la transformación del mercado laboral. La formación dual, la definición de currículos, nuevos másteres, la hibridación de titulaciones, proyectos de estudiantes tutorizados conjuntamente entre empresa y universidad, programas de formación continua destinados a la capacitación profesional.
En este escenario, Mondragon Unibertsitatea define y diseña sus programas formativos para dar respuesta a estas necesidades. En septiembre se han puesto en marcha diferentes programas formativos: Máster en Automatización Industrial, Máster en Ciberseguridad Industrial, Curso de Big Data para la Industria, además del de Técnico Superior en Mecatrónica Industrial y del Grado en Ingeniería Mecatrónica.