El grupo Nicolás Correa, empresa referente a nivel mundial en soluciones de fresado, contabilizó durante el primer semestre del año un aumento del 15% en sus ingresos ordinarios en comparación con el mismo periodo de 2020, con una facturación de 37,9 millones de euros. Este aumento indica una recuperación de los niveles previos al covid-19, al situarse la cifra de negocio prácticamente igual que en el primer semestre de 2019.
El sólido desempeño de los ingresos, junto con una estricta política de control de costes, ha llevado a un crecimiento del ebitda del 9%, que supone 4,6 millones de euros y que mantiene su ratio sobre ingresos en el 12%, muy por encima de la media en el sector. El beneficio antes de impuestos (BAI), por su parte, ha sido de 3,5 millones de euros frente a los 3,2 del mismo periodo del año anterior, lo que supone una rentabilidad sobre ingresos del 9,2%.
En cuanto a la cartera de pedidos, esta se sitúa en su mejor nivel de los últimos diez años tras haber aumentado un 92% hasta los 44,8 millones de euros, lo que, junto a la recuperación generalizada de la economía, le permitirá cerrar el ejercicio con una facturación similar a la prepandémica.
Estas cifras marcan un importante hito para la firma, ya que su estrategia de estabilidad le ha permitido continuar con un elevado nivel de actividad y rentabilidad. Todo ello reforzado por la importante actividad exportadora de la compañía, la cual representa el 95% de su volumen de facturación
“Presentamos unos buenos resultados y afrontamos el segundo semestre con retos importantes pero con la ilusión renovada que nos da el contar con una cartera en máximos históricos, ha destacado Carmen Pinto, CEO del grupo Nicolás Correa.