La pandemia ha obligado a las empresas a tomar decisiones de forma urgente y ágil, a cambiar sus formas de trabajar, a gestionar de distinta manera y en circunstancias complicadas. Y, en este trabajo, las consultorías han jugado un papel fundamental.

La aportación de valor de las consultoras ha sido clave durante la pandemia y lo será también cuando esta situación termine. Muchas empresas han sido asesoradas por estas organizaciones en diversos temas, pero especialmente en la transformación digital, un cambio que ya se venía vislumbrando, pero que el covid ha impulsado de manera radical. Una transformación tecnológica que debe ser aplicada desde el conocimiento del negocio para hacerlo más competitivo.
Así, la generación del conocimiento en la gestión no solo ha de partir de los directivos, sino también de ‘gurús del management’, de consultorías o desde las propias administraciones públicas. En este último caso, un claro ejemplo es el programa Innobideak del Gobierno vasco, que persigue promover acciones que mejoren la competitividad de las empresas en tres líneas de ayuda: Innobideak Kudeabide para la aplicación de herramientas de gestión avanzada; Innobideak Lehiabide para apoyar proyectos orientados a lograr una mayor diversificación; e Innobideak Pertsonak para fomentar la participación de las plantillas.

Precisamente, la gestión de las personas y el talento son dos de los ámbitos en los que más implicadas están las consultoras. Desde Adecco aseguran que los líderes de gestión del talento tendrán una “influencia significativa en cómo será el futuro de la contratación y el mundo del trabajo”. Por su parte, desde Deloitte señalan que la pandemia ha permitido “empoderar el rol de Recursos Humano”.
Además, son muchas las consultoras vascas que se dedican a la innovación en la gestión, un elemento fundamental también para que las empresas sean más competitivas tras la pandemia. En este ámbito trabajan, por ejemplo, Betean, Asenta, Acorde Consulting, OP Consultores o Sayma.