A pesar de la recuperación registrada el pasado ejercicio, y que se suma a la experimentada en 2017, el volumen de nuevo crédito empresarial es todavía un 50% inferior al que se otorgaba en 2007 en el caso de las pymes, y hasta un 71% menor en el caso de las grandes empresas.
Según se detalla en el último número del Newsletter de Confebask sobre Financiación Empresarial, hasta el pasado mes de noviembre, último dato disponible, el crédito nuevo a las empresas había subido de media un 8,6%. Sin embargo, por tamaño, se observa que mientras el préstamo a las pymes aumenta un 6,1% -un ritmo menor que en 2017- el crédito nuevo otorgado a las grandes empresas creció prácticamente el doble, un 11,5%, y a un ritmo muy superior al que registró esta variable el año anterior. Por su parte, el precio de esos préstamos se mantiene en mínimos e incluso, en el caso de las pymes, es hoy, por primera vez, ligeramente inferior a lo que pagan sus competidoras europeas.