El hidrógeno comienza a dar señales como vector energético para impulsar la movilidad. Una de ellas es el proyecto Hympulso, donde una decena de empresas españolas trabajan en el desarrollo de un sistema de propulsión basado en pila de hidrógeno renovable con el objetivo de instalarlo, por primera vez, en un tren de alta velocidad. En el proyecto, liderado por Talgo, las entidades diseñarán un conjunto de tecnologías aplicables al tren ‘todoterreno’ Talgo 250 que permitirían electrificar la red ferroviaria con energía generada íntegramente a partir de fuentes renovables.
Una de las empresas que participa es Ingeteam, que será la encargada de fabricar y probar convertidores de alta potencia reversibles capaces de recargar la batería desde la catenaria, siendo partícipes también del proyecto EPowerlabs, Optimus3D, Repsol y Sener y centros como Ikerlan, Tecnalia y la Universidad Pontificia de Comillas, entre otros.
No es la única iniciativa en torno al hidrógeno en materia de movilidad ferroviaria ya que el proyecto FCH2RAIL, un tren demostrador bimodo propulsado por hidrógeno en el que CAF participa como fabricante, comenzó en 2023 sus pruebas en busca de la fiabilidad del vehículo. El proyecto toma como base una unidad actual de cercanías de Renfe, en la que se ha instalado un nuevo sistema de generación eléctrica a partir de la hibridación de la energía proveniente de pilas de hidrógeno y baterías, integrándose con el sistema de tracción del vehículo.