a defensa de un mundo rural “fuerte, vivo y dinámico” protagonizó la VI edición del Congreso Gure Lurra ‘Sembrando futuro’, impulsado por la Diputación Foral de Gipuzkoa con el objetivo de servir como punto de encuentro y diálogo entre el primer sector y la población urbana.
Con el equilibrio verde como eje vertebrador, la jornada, en la que participaron unas 500 personas, se centró en visibilizar el potencial que tiene el primer sector para hacer frente a la emergencia climática y garantizar el bienestar de Gipuzkoa, y mostrar las oportunidades que presenta la explotación agroganadera en lo que respecta a su comercialización en nuevos mercados. Baserritarras, investigadores, agentes sectoriales, representantes institucionales y distintas personalidades de prestigio compartieron con la ciudadanía cuáles son los retos y el papel de este sector desde un punto de vista económico, social y medioambiental.

La diputada general destacó la puesta en marcha de iniciativas innovadoras para evitar el abandono de los bosques y favorecer el relevo generacional del primer sector

Basotik y Gaztenek
La diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza, defendió “la necesidad de trabajar por un equilibrio verde” que permita al conjunto del territorio “avanzar en la respuesta al cambio climático, en la alimentación sostenible y en la expansión de hábitos de vida saludables”, desafíos “de enorme calado” ante los cuales ha reivindicado el papel “protagonista” que debe jugar el primer sector.
Mendoza destacó el compromiso de la institución foral por mantener la apuesta por el primer sector llevada a cabo en las dos últimas legislaturas y hacerlo, además, “con la determinación de activar iniciativas innovadoras”. Entre otras, mencionó como ejemplos la fundación Basotik para evitar el abandono de los bosques e impulsar una gestión sostenible de la superficie forestal, el fomento de la figura del baserritarra mixto-profesional o el impulso al programa Gaztenek para favorecer el relevo generacional en el primer sector. 
En Gure Lurra participó el portavoz global del movimiento ‘Slow’, Carl Honoré, quien puso de manifiesto la importancia de “desacelerar en un mundo que va cada vez más rápido”, así como “la necesidad de conectar y de acercarnos al ámbito natural”. Tras su intervención, se abrió un coloquio bajo el título “Cómo podemos garantizar la actividad agraria de Gipuzkoa para hacer frente a la emergencia climática?”.