Gorizelaia pide recuperar para la Universidad el esfuerzo inversor
El rector hace balance positivo de sus ocho años al frente de la UPV-EHU y en su despedida pide a las instituciones que cuiden “la mina del conocimiento”
- Estrategia Empresarial
- 03-Enero-2017
El rector Iñaki Gorizelaia reparte su programa a un grupo de estudiantes de la UPV-EHU, en una imagen de la campaña 2012.
Tras dos mandatos y ocho años en el cargo, Iñaki Goirizelaia deja el Rectorado de la UPV-EHU y, en su despedida, pide a las instituciones que cuiden “la mina del conocimiento” que representa la Universidad y recuperen el esfuerzo inversor en educación superior e investigación.
Iñaki Goirizelaia cede el testigo a la recientemente elegida nueva rectora Nekane Balluerka, para iniciar un periodo sabático de dos años y viajar a la Universidad de Boise (Estados Unidos) donde impartirá un grado sobre la influencia de la educación, los medios de comunicación y la Red de Ciencia y Tecnología en el desarrollo industrial del País Vasco.En su despedida, Goirizelaia realizaba un balance positivo de los ocho años que ha permanecido al frente de la Universidad Pública Vasca, con un primer mandato (2009-2012) dominado por la necesaria adecuación al Espacio Europeo de Educación Superior (Bolonia) y un segundo, hasta la fecha, lastrado por la crisis económica y los recortes presupuestarios impuestos desde Madrid, lo que, según confesaba, ha complicado mucho una gestión adecuada del personal docente.
Por todo ello, y de cara al futuro, el todavía rector hacía un llamamiento a las instituciones públicas en favor de un marco de financiación “estable a corto y medio plazo” que vuelva a alcanzar la que se estableció en el anterior Plan Universitario 2011-2014 que situaba la inversión en investigación y desarrollo en el 0,49 % del PIB vasco y en el conjunto de las actividades de Educación Superior, en el 1,3 % del PIB.
Goirizelaia pide a las instituciones
un marco de financiación estable
a corto y medio plazo
Goirizelaia deja la UPV-EHU con alrededor de 45.000 estudiantes de grados y de posgrados y otros 11.000 de cursos de verano, 5.500 personas dedicadas a la docencia y a la investigación, una plantilla de personal de administración y servicios de unas 1.900 personas, un presupuesto de 405 millones de euros para este año, y una oferta de 68 grados y 111 posgrados, algunos de ellos en inglés. Deja a la institución académica entre las 400-500 mejores universidades del mundo, según el ranking de Shanghai, con una Escuela de Ingeniería de Bilbao por primera vez este año entre las 200 mejores del mundo y una Facultad de Matemáticas, entre las 150 mejores. En su legado, una producción científica que se ha duplicado y el impulso a la creación de 137 empresas que han generado 1.061 empleos en ocho años.