Fagor Ederlan Group inauguró oficialmente en Bergara (Gipuzkoa) una nueva planta de aluminio a baja presión que cuenta con 220 empleados y en la que la cooperativa ha invertido 55 millones para su desarrollo completo.

La nueva factoría está especializada en la fabricación de componentes de suspensión en aluminio a baja presión y es la planta icono en desarrollo tecnológico en este material del grupo, junto con sus otras tres fábricas gemelas en activo en México, China y Arrasate.
A la inauguración acudieron numerosas personalidades del ámbito institucional, de la industria y de la Corporación Mondragon, como el lehendakari Iñigo Urkullu; la consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras, Arantxa Tapia; el presidente de Corporación Mondragon, Iñigo Ucín; el presidente de Fagor Ederlan, Aitor Axpe, y el director general de Fagor Ederlan, Juan Mari Palencia, entre otros."
Bajo el lema ‘Sustraitik mundura’ (‘Desde las raíces al mundo’), el acto sirvió a Fagor Ederlan Group para defender su apuesta por los componentes futuros de la automoción, por el desarrollo tecnológico y por crecimiento internacional, sin deslocalizar, favoreciendo el impacto económico positivo para la comunidad y entorno donde está asentado.
La planta de Fagor Ederlan en Bergara fabrica anualmente 1,7 millones de piezas que abastecen a las marcas de automóvil premium del mercado como BMW, Daimler o Jaguar LandRover, entre otras. Está especializada en la fundición de aluminio a baja presión y mecanizado para la fabricación de componentes de seguridad de chasis.

Esta es una de las cuatro plantas de aluminio a baja presión de Fagor Ederlan en el mundo, que suministran más de 6,2 millones de unidades de este tipo de producto y tiene una proyección de crecimiento que apunta a los 7,5 millones en 2020: 3,5 millones entre China y México y cuatro millones entre Arrasate y Bergara, superando los ocho millones a partir del 2021.
Es de destacar el papel transformador y de generación de empleo de Fagor Ederlan ya que esta planta ocupa el espacio de la antigua Geyser Gastech y, gracias a la apuesta de crecimiento y desarrollo de Fagor Ederlan, se ha transformado en un nuevo proyecto que acoge a 220 trabajadores, una plantilla muy joven con una media de edad de 38 años.
En esta plantilla se ha integrado a profesionales de otras áreas de Fagor Ederlan, personas provenientes del antiguo Fagor Electrodomésticos, así como a nuevos empleados. Algo que muestra la fuerza y vigor del modelo cooperativista: la apuesta por las personas, la adaptabilidad y la innovación en una economía cambiante.