Más allá de los significados que podemos encontrar en cualquier diccionario, relaciono el término expedición con “viaje”, y eso enseguida me lleva a asociarlo con aventura, riesgo, pero también con planificación, objetivo, metas. Y también, de alguna manera, quizás contradictoria, con reto personal y soledad pero al mismo tiempo con algo tan importante como son el equipo y l@s compañer@s de viaje. Todas esas acepciones podrían relacionarse con los proyectos y personas emprendedoras, que quieren iniciar una “expedición”, como las que apoyamos desde Fomento de San Sebastián (casi 700 cada año).

“Relaciono el término expedición con ‘viaje’, y eso enseguida me lleva a asociarlo con aventura, riesgo, pero también con planificación, objetivo y metas”

Podría extenderme en desarrollar todos esos elementos y su conexión con las diferentes fases o herramientas dentro de nuestra estrategia y amplio portafolio de herramientas y programas, pero me gustaría centrarme en reiterar la importancia que el emprendimiento tiene para Donostia, el Ayuntamiento de San Sebastián y la propia Sociedad de Fomento, como agencia de Innovación de la ciudad. Porque si bien la tasa de emprendimiento (TEA) ha subido en San Sebastián (6,6%) y se sitúa entre las más altas a nivel estatal, mantener nuestra competitividad como territorio y nuestro nivel de desarrollo requiere situar el emprendimiento en los primeros lugares de nuestra agenda. Para ello es clave contar cada vez con más y mejor preparad@s expedicionari@s. Personas que quieran hollar las más altas cumbres internacionales. Nichos de mercado y sectores donde la tecnología y su acelerada evolución, pero también la propia evolución de la sociedad, abren nuevas oportunidades.

Abordar proyectos en biociencias o la industria 4.0., entre otros, requiere material y logística sofisticadas, expertos guías, etc. Talento, tecnología, financiación, etc, son retos clave que debemos abordar. Pero también hay necesidad y oportunidades en las pequeñas cimas de nuestro entorno, a las que acudimos de manera recurrente. Sectores de nuestra economía urbana que configuran nuestro modelo de vida, nuestra propia identidad (comercio, gastronomía, servicios…). Su transición digital, sostenibilidad o los nuevos hábitos de consumo también son retos mayores. 

“Queremos ser, como ciudad y como Fomento, un gran campo base para esas expediciones, lideradas por personas de aquí o de cualquier lugar del mundo”

Necesitamos personas que quieran arriesgar, con ideas que se transformen en proyectos, que traccionen innovaciones en cualquier sector con presencia en nuestra ciudad. Desde una mentalidad de crecimiento. Y nuestro propósito es apoyar esas personas y proyectos. Impulsar la cultura emprendedora en las edades más tempranas, como actitud vital, y apostar por acompañar de manera decidida en su crecimiento y escalabilidad a las start up de nuestro territorio en los sectores clave antes mencionados. Son dos de los pilares de nuestro plan estratégico para impulsar San Sebastián como hub de emprendimiento innovador en los próximos años. Desde la humildad pero con ambición de crecer y convertirnos en un gran lugar para vivir, pero también para emprender.

Queremos ser, como ciudad y como Sociedad de Fomento, un gran campo base para esas expediciones, lideradas por personas de aquí o de cualquier lugar del mundo. Y para ello, necesitamos un tercer pilar, que es la colaboración con el ecosistema. Con entidades públicas y privadas, el sector educativo y el tecnológico, todas aquellas que también apuestan por apoyar y fomentar esas expediciones y que comparten con nosotros ese campo base que es la ciudad. El nuevo Talent House, ya en su fase final de adecuación, será un proyecto clave. Un lugar común, abierto a la ciudadanía, a los proyectos emprendedores y al conjunto del ecosistema, con una apuesta por trascender internacionalmente también. Un proyecto referente para impulsar una estrategia de innovación y emprendimiento, en nuestra propia expedición a la montaña, como ciudad.