La ciudadanía vasca refuerza cada vez más su compromiso con el entorno. Así lo demuestran los últimos datos de Ecoembes, la organización que promueve la sostenibilidad a través del reciclaje de envases, que revelan que durante 2014 las toneladas de envases domésticos reciclados en Euskadi crecieron un 5,3% respecto al año anterior. Así, si en 2013 se reciclaron 70.195 toneladas, durante el pasado ejercicio esta cifra creció hasta las 73.947.
En cuanto a la aportación ciudadana, cada persona depositó una media de 16,5 kilos de envases ligeros (plásticos, latas y briks) en el contenedor amarillo, y 30,8 kilos de cartón y papel en el contenedor azul durante 2014, muy por encima de la media estatal. El nivel de concienciación se refleja también en los residuos depositados incorrectamente en el contenedor amarillo. En 2014 se situó en 16,8%, dos puntos por debajo de los índices registrados el año anterior y 13 por debajo de la media española.
Estos buenos resultados son fruto de un modelo de colaboración público-privada que empieza con el ciudadano y que concluye en una de las cuatro plantas de selección que hay en Euskadi.