El Gobierno vasco ha confirmado que el vertedero de Zaldibar (Bizkaia) se clausurará definitivamente una vez se completen las labores de emergencia volcadas en encontrar los restos de Joaquín Beltrán, uno de los dos trabajadores sepultados por el derrumbe del mismo hace un año. El cuerpo sin vida del otro trabajador accidentado, Alberto Sololuze, fue localizado el pasado mes de agosto.
Durante el tiempo que ha transcurrido desde el fatal derrumbe se han excavado 525.000 metros cúbicos de residuo para la estabilización del vertedero, de los cuales 372.038 metros cúbicos se han rastrillado y cribado para la búsqueda.
Por otra parte, el Gobierno vasco ha resuelto que la empresa Verter Recycling es responsable de los daños significativos generados por el deslizamiento en los suelos y las aguas superficiales y subterráneas de la zona del vertedero de Zaldibar y le ha requerido la presentación de un proyecto de reparación de los daños medioambientales.
Tras el incidente de Zaldibar y el cierre del vertedero guipuzcoano de Mutiloa en marzo de 2020 se reduce la capacidad de vertido de residuos industriales de Euskadi en 850.000 toneladas. Según datos oficiales, en 2019 los vertederos vascos que recogían residuos industriales no peligrosos gestionaron 2,4 millones de toneladas de desechos, cifra que ha caído hasta los 1,6 millones en 2020.