El lehendakari inaugura la nueva planta productiva de Biolid en Basauri

Prevé aumentar su facturación un 50% los próximos tres años hasta alcanzar los 15 millones de euros

Visita a la nueva planta de productiva de Biolid Industrias gráficas en Basauri. Foto: Biolid Industrias gráficas

El lehendakari Iñigo Urkullu ha inaugurado este lunes la nueva planta de productiva de Biolid Industrias gráficas en un acto al que han acudido la consejera Arantxa Tapia, la diputada de Promoción Económica Ainara Basurko, el alcalde de la localidad Asier Iragorri, Guillermo Buces y José Manuel Buces, CEO y presidente de la compañía. Además, han estado acudido otros representantes institucionales como la presidenta y el secretario general de CebeK, Carolina Pérez Toledo y Fran Aspiazu, el presidente de la Cámara de Comercio de Bilbao José Ignacio Zudaire y el senador Igotz López, entre otros.
Biolid, empresa familiar con más de 25 años de historia, en segunda generación, es referente en la fabricación de etiquetas para los mercados siderúrgico, de automoción, siderurgia, bebidas, etc.  Con la entrada de Industrias Gráficas Marcal en el Grupo en
2019,  se  añadió  a  esta  cartera  de  productos  las  etiquetas  para  alimentación  y productos del  hogar,  lo  que  completa  el  abanico  de  productos  y  hace  del BIOLID Industrias Gráficas uno de los mejores preparados y diversificados de los fabricantes de etiquetas en España.
Actualmente, la empresa emplea a 67 personas y factura en torno a los 10 millones de euros. Esperan alcanzar los 12,3 millones de euros en 2024 y 15 millones de euros en 2027, y generar 10 nuevos puestos de trabajo. Exportan a más de 14 países en el mundo. “Estamos trabajando en Marruecos, Vietnam, Tahilandia, China, Serbia, México… Casi la totalidad de nuestras exportaciones son de etiquetas para el sector siderúrgico o de automoción”. De hecho, la empresa ha obtenido en enero de la certificación de calidad IATF, requerida por los clientes de automoción y que coloca en el top 5 mundial de proveedores de etiquetas de la multinacional alemana Robert Bosch, "la primera empresa vasca de etiquetas acreditada con dicha certificación".
Con el acto de este lunes, concluye el proyecto ‘Biolid Berria’, que comenzó hace 14 años con motivo de la adquisición por parte de Labin, de Anmavi Etiquetas Vallisoletanas e Industrias Gráficas Marcal y con la paulatina concentración en la actual fábrica de Basauri de toda la actividad que la empresa tenía en Valladolid y Zamudio. En una superficie de 4.000 metros cuadrados, la reorganización ha exigido desinvertir en algunas máquinas con un grado de ocupación menor e incorporar otras, modernizando el parque y ganando en productividad. Al mismo tiempo, gracias al trabajo conjunto con una ingeniería vizcaína, se ha diseñado un nuevo lay-out de planta lo que “ha supuesto una ganancia muy importante en reducción de tiempos y productividad”, destaca Buces.

Más 3 millones de inversiones entre 2022 y 2024
Entre 2022 y 2024, Biolid ha llevado a cabo inversiones por valor de 3 millones de euros, tanto en la compra de maquinaria como en la mejora de procesos. Entre las adquisiciones destaca una innovadora máquina AB Graphic de acabado de última generación que, tras su puesta en marcha, permitirá duplicar la productividad en la impresión de etiquetas digitales y logísticas de media tirada. También se ha adquirido una máquina Lemu mediante una colaboración con una empresa ubica en Tolosa, mediante la que, “además de posicionarnos en los primeros puestos de capacidad de producción de etiquetas logísticas, queremos cambiar de manera radical la forma de trabajar, innovando en procesos y con la intención de ganar mucho en productividad”, subraya Buces. Además, se ha invertido en una máquina de impresión flexo Lombardi de 10 colores y un ancho de 530 mm lo que nos posibilitará profundizar en el mercado del embalaje flexible (sleeves).

Una apuesta por la sostenibilidad y la economía circular
Como señala Buces, “se remodelado toda la planta, actualizando desde las luminarias, pasando de focos halógenos a Led, hasta las propias máquinas, pasando poco a poco de lámparas de secado UV convencional a UV Led con el consiguiente ahorro energético y disminución de emisión de ozono a la atmósfera”. Junto con proveedores y clientes, se ha desarrollado el proyecto “Infinity” para que “seamos capaces de evitar que los clientes tiren al vertedero el papel siliconado donde van colocadas las etiquetas. Queremos que este papel se recicle para volver a fabricar este mismo producto”, recalca.
Hay que destacar que el 100% de la potencia eléctrica utilizada por Biolid en sus procesos procede de fuentes 100% renovables. Además, la compañía está estudiando instalar placas fotovoltaicas en el tejado de la nave de forma que “seamos capaces de autoabastecernos en el orden de un 50%”.

Más noticias de Actividad empresarial / Enpresa jarduera