A través de la fórmula ‘Peer to Peer’, la economía colaborativa ha encontrado también su cauce de financiación alternativa a la bancaria mediante distintas plataformas de crowdfunding o crowdlending, vehiculizadas a través de internet, dirigidas a proyectos empresariales normalmente pequeños, creativos e innovadores, y que en los últimos años han conocido un auge tan importante en España que ya está siendo objeto de regulación legislativa, dentro del proyecto de Ley de Fomento de la Financiación Empresarial, actualmente en el Senado. En el mercado europeo, la financiación alternativa online creció el pasado año un 144% hasta alcanzar los 3.000 millones de euros, cifra que podría alcanzar los 7.000 millones este año.

La financiación colectiva o microfinanciación movilizó el pasado año en España 62 millones de euros, un 14% más que el año anterior. En total, y desde 2012, esta modalidad de financiación ha movido inversiones por valor de 101 millones de euros. Y aunque el crowdfunding ‘de recompensa’ sigue siendo el más habitual en las plataformas, el pasado año registraron importantes incrementos el crowdlending o préstamo entre particulares y empresas a cambio de un tipo de interés, y el ‘equity crowdfunding’, en el que se ofrece una participación sobre beneficios de la empresa a cambio de las aportaciones recibidas, y quienes las realizan entran a formar parte de la empresa.