La Confederación Empresarial de Bizkaia acaba de celebrar su Asamblea Anual y en este contexto ha presentado su informe de coyuntura que, en líneas generales, constata que el territorio mantiene una senda de crecimiento, a pesar de que las incertidumbres internacionales están desacelerando su ritmo. Pero llama la atención un dato que pusieron sobre la mesa los responsables de Cebek: la creación de empresas. Desde el comienzo de la crisis han desaparecido 2.733 empresas en Bizkaia, el 8% del total, y sólo se han recuperado 990 compañías. Es decir, un saldo neto negativo de 1.743 empresas. Este es un indicador que no acaba de recuperarse tras la crisis. Desde diferentes ámbitos se ha llamado la atención sobre este hecho, sobre el escaso nivel de emprendimiento. Si se acepta que la empresa genera valor y contribuye a levantar la economía, que son las empresas las que contratan y las que invierten, la sociedad debería comenzar por reivindicar el valor de empresarias y empresarios, incrementar su reconocimiento social. Ser empresario es un gran reto, una gran responsabilidad y supone asumir un desafío constante. Todos los actores de la sociedad deberíamos prestigiar la figura del empresario y promover que los jóvenes vean en la creación de una empresa una salida profesional de calidad y un valor social imprescindible para mantener nuestro estado del bienestar.