Cuatro de cada 10 vascos confían plenamente en la domiciliación bancaria para efectuar sus pagos y confían en este sistema más que en las tarjetas de crédito o débito. Así se desprende, al menos, de un reciente estudio realizado por la startup británica GoCardless, dedicada a la gestión y realización de domiciliaciones bancarias online de forma automática.
El estudio, que analiza las preferencias de pago de españoles, alemanes, franceses y británicos destaca que el 31% de los encuestados españoles declara sentirse ‘muy cómodo’ utilizando la domiciliación. Navarra, con un 44%, es la comunidad autónoma donde existe mayor confianza en este sistema. En Euskadi, el 42% de los encuestados declara sentirse muy cómodo domiciliando sus pagos, en tanto que la confianza que genera el uso de las tarjetas de crédito es solo del 31%.

Crecen las tarjetas
Sin embargo, y según otro estudio, esta vez firmado por Tecnocom y Analistas Financieros Internacionales, el número de tarjetas de crédito ha crecido en España hasta los 45 millones y se sitúa ya en los niveles precrisis. La culminación de la reestructuración bancaria, el retorno a la senda del crecimiento económico y el impulso de nuevos emisores explican este cambio de tendencia. No obstante, según los autores del estudio, la financiación con tarjeta de crédito es una práctica poco explotada en España, a diferencia de América Latina, y se vislumbra como uno de los vectores de negocio asociados a los medios de pago.
El parque de terminales de punto de venta (TPV) creció en 2015 un 13%, hasta los 1,6 millones de aparatos, contactless en su práctica totalidad. El número de operaciones de compra realizadas en España con tarjeta aumentó un 7,2%, en línea con el crecimiento registrado el año anterior.