El aprendizaje de idiomas ha vivido un notable crecimiento en los dos últimos años, tal y como reflejan los datos obtenidos por la plataforma de Live Learning Preply, que ha detectado un incremento de demanda de formación en Business English del 50%.
La principal motivación de los profesionales para perfeccionar sus conocimientos de lenguas extranjeras es la mejora de su situación laboral (63%). En el caso específico del inglés, el 49% lo estudia para crecer y desarrollarse profesionalmente, seguido del 10% que lo hace porque piensa trasladarse al extranjero y el 5% para preparar una entrevista de trabajo.
Cuando inician su proceso de aprendizaje, el 50% de los alumnos se marca objetivos asociados a su carrera profesional -fluidez en las reuniones, elaboración de informes, asistencia a presentaciones, etc-, a alcanzar un determinado nivel (20%) o a mejorar su comunicación en los viajes de ocio (12%). La falta de tiempo resulta para el 31% una barrera fundamental para empezar a estudiar un idioma.