Euskadi y Aquitania han firmado un acuerdo de colaboración en materia sanitaria para dar respuesta a los desafíos sanitarios y sociales del futuro. El memorándum, suscrito entre el consejero de Salud, Jon Darpón, y la vicepresidenta de la región de Aquitania, Solange Ménival, se engloba en el contexto de los retos que el progresivo envejecimiento social deparará, tanto en áreas de innovación social como de desarrollo económico.
El envejecimiento y sus consecuencias se sitúa como uno de los grandes campos de cooperación entre ambas regiones transfronterizas. Se busca fomentar sinergias en estos ámbitos para contribuir a dar una respuesta coordinada a las necesidades que plantea la evolución demográfica.
El compromiso firmado establece que se fijarán equipos de trabajo para desarrollar innovaciones en los campos del tratamiento de patologías crónicas para reducir sus efectos y aumentar la autonomía de las personas mayores.
Asimismo, se aboga por avanzar en la investigación y empleabilidad de profesionales de sectores relacionados con el envejecimiento. Actualmente, Aquitania cuenta con cerca de 500.000 personas con enfermedades crónicas y en los próximos 25 años estima que el número de personas con más de 60 años aumente en un 70%. En el caso de Euskadi, la proyección demográfica sitúa en el 26,5% la población que superará los 64 años en 2020, lo que supone más del doble de la actual.