En la actualidad, la industria del automóvil debe de afrontar nuevos retos. Atrás quedan los años donde la decisión de compra del vehículo estaba muy influida por características meramente mecánicas o de diseño, y toman fuerza aspectos relacionados con una conducción más eficiente.
En este sentido, el concepto de aligeramiento juega un papel clave en la obtención de esta eficiencia, premisa muy interioriza por Batz y sobre la que lleva trabajando desde hace más de una década.
Así, y gracias a una intensa labor en innovación y a una estrecha relación con los fabricantes de automóviles, la cooperativa Batz se ha convertido en uno de los principales proveedores de soluciones en aligeramiento contribuyendo, de esta forma, a la reducción del consumo de combustible y, en consecuencia, a las emisiones de CO2. En resumen, a conseguir un coche más ligero y respetuoso con el medio ambiente.
Para dar respuesta a esta necesidad, la compañía dedica importantes recursos al desarrollo de materiales, diseño y procesos de fabricación avanzados proporcionando soluciones tanto en componentes estructurales como en aerodinámicos en composite que permiten optimizar la aerodinámica y eficiencia del vehículo.

Además, su firme apuesta por la internacionalización y el desarrollo de acuerdos comerciales ha permitido a Batz acometer proyectos globales dando respuesta tanto a las necesidades estratégicas de sus clientes OEM’s de una forma más eficaz y eficiente como a un mercado cada vez más exigente y con mayor conciencia medioambiental. En este sentido, cabe destacar la próxima apertura de una ingeniería en Estados Unidos, Batz Automotive USA, que dará soporte a sus clientes en la región Nafta.
Este proyecto que nació como cooperativa en Igorre (Bizkaia) hace más de 50 años y que forma parte de Mondragon, se ha convertido en un sólido grupo industrial que cuenta con más de 1.600 personas y 15 plantas productivas repartidas por todo el mundo.